Ana Emilia Lahitte

A los 91 años falleció Ana Emilia Lahitte, pérdida que significó un profundo dolor para sus seres queridos más cercanos como así también para aquellos que conocieron sus destacados valores como poeta y como mujer ligada al universo literario tanto local como internacional.

Había nacido en La Plata el 19 de diciembre de 1921 y de chica se crió en su casa de 53 entre 10 y 11, propiedad que había sido construida por sus abuelos y que, ya de joven, Ana Emilia convirtió en sede de sus emblemáticos talleres literarios y en un lugar de referencia ineludible para los poetas de la Ciudad.

Generosa y viajante incansable por el interior del país, su labor creadora abarcó la poesía, la narrativa, el ensayo, el teatro y el periodismo.

Como poeta publicó, entre otros libros: Sueño sin eco (1947), El muro de cristal (1952), La noche y otros poemas (1959), Madero y transparencia (1962), Al sur de marzo (1969), Los Abismos (1979), Los dioses oscuros (1980), El tiempo, ese desierto demasiado extendido (1993), El padre muere (2006) y Gironsiglos (2006). Entre sus ensayos y compilaciones poéticas figuran: Veinte poetas platenses contemporáneos (1962), María de Villarino (1966), Roberto Themis Speroni (1975) y Cinco poetas capitales (1995).

Obtuvo, asimismo, numerosas distinciones, algunas de las cuales son: Pluma de Plata del PEN Club Internacional, Centro Argentino (1980), Puma de Oro de la Fundación Argentina para la Poesía (1982 y 2001), Primer Premio Nacional de Poesía, Región Buenos Aires (1983), Premio Konex (1994) y Premio de Poesía “Esteban Etcheverría”, de Gente de Letras (1999).

Amiga y colega de figuras como Juan Ramón Jiménez, Antonio Buero Vallejo, León Felipe, Gabriela Mistral, Gerardo Diego o Gregorio Marañón, los poemas de Ana Emilia Lahitte fueron reconocidos y valorados por poetas de la talla de Juan Gelman y de buena parte de los principales exponentes de la poesía contemporánea.

Considerada por muchos como “la Victoria Ocampo de La Plata”, Ana Emilia dirigió por más de 20 años uno de los primeros talleres de poesía de la Argentina, llegando a superar con el sello Hojas y Cuadernos de Sudestada las 300 publicaciones.

Su obra fue recogida en varias antologías y traducida al inglés, francés, alemán, italiano y portugués. En 2001, la Municipalidad de La Plata la designó Ciudadana Ilustre.

El poeta Osvaldo Ballina, uno de sus grandes amigos y quien estuvo junto a ella en sus últimos días, la recuerda como una persona “de una generosidad asombrosa que la diferenciaba del resto y que la hacía siempre preocuparse por el otro”.

Se caracterizó por ser una persona sociable y generosa y, sobre todo, de un carácter lúcido y elegante que nunca pasaba inadvertido. Dueña de una personalidad rica en virtudes, Ana Emilia Lahitte deja un legado que los suyos jamás olvidarán.

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE