La separación de Boudou, otra historia de pareja que condimenta la política

La vida personal de los hombres públicos influye, muchas veces, en sus destinos políticos y suele tener, en algunos casos, repercusiones que trascienden las fronteras de su intimidad. La Historia, aquí y en el mundo entero, está llena de anécdotas de amores y separaciones que, de una u otra forma, impactaron sobre trayectorias políticas de mayor o menor relevancia.

La separación de Amado Boudou y la periodista Agustina Kämpfer no parece uno de esos casos que puedan torcer el rumbo de las cosas. La suerte política del Vicepresidente parece “liquidada” desde hace rato. Procesado en la causa penal por la apropiación presuntamente ilegal de la ex imprenta Ciccone Calcográfica, los escándalos judiciales lo han acorralado al extremo de una virtual agonía política e institucional.

Un divorcio anterior ha contribuido a la enorme erosión de su capital político. También está procesado -como se sabe- por la supuesta adulteración de los papeles de un auto en el marco de una controvertida separación de su primera mujer.

Desde el punto de vista político e institucional, la separación de Kämpfer sólo cobra relevancia por un interrogante: ¿Podría convertirse en una ruptura traumática que derive en mayores complicaciones judiciales para el Vicepresidente de la Nación? Concretamente, ¿su ex pareja podría aportar ahora elementos que agreguen información sobre el caso Ciccone? En algunas mesas políticas ayer empezaban a instalarse especulaciones a partir de estas preguntas. Y recordaban un dato conocido: el escándalo que ha arrasado políticamente con Boudou se inició por la denuncia de una ex mujer, la de Alejandro Vandenbroele, formulada en el marco de un divorcio conflictivo.

Hasta ahora, no hay ninguna señal de que las cosas puedan derivar en ese sentido. Muy por el contrario, Kämpfer hizo extensas declaraciones en las que, si bien se cuidó de no opinar sobre la situación judicial de Boudou, dio claras señales de una lealtad que parece haber sobrevivido a la relación de pareja.

“Amado está en mi corazón. Hoy nos une un amor enorme, eterno e intocable. Pero las cosas fueron cambiando y ya no estamos juntos. Nuestro amor mutó en otro tipo de amor, muy respetuoso, muy fraternal, muy importante para los dos, pero se terminó”, dijo Kämpfer en una entrevista con el periodista Santiago del Moro.

La periodista aludió a los momentos complicados que atraviesa en la Justicia el vice de Cristina: “Yo estuve en las malas y las malas fueron muy malas, de verdad”. Y siguió: “A mí me generaba también angustia en lo personal y también en lo profesional”.

Para Kämpfer, las causas de la ruptura se debieron a la agitada vida política y los escándalos: “En cinco años nos pasaron muchas cosas. Yo lo conocí cuando él era director de Anses. Inmediatamente, a los dos meses o menos él asumió como ministro de Economía, y enseguida se convirtió en Vicepresidente. Esos son acontecimientos únicos de la vida que te traen mucha intensidad, para bien o para mal”.

“LA VORAGINE”

“La política te pide que le des la vida. Es como un niño, como un hijo, que te pide todo, todo el tiempo, y a cambio te da lo que te da. Y en esa intensidad, en esa vorágine, nosotros lamentablemente no pudimos encontrar el espacio para solucionar algunas cuestiones que nos pasaban como pareja”, dijo la periodista.

La separación de Boudou y Kämpfer era, desde hace varios meses, un “secreto a voces”. Sin embargo, mantenían algunas apariciones públicas y un estricto silencio sobre su situación personal. Ahora la periodista decidió “blanquear” las cosas, en momentos en que Boudou ha restringido su rol institucional y político a esporádicas e incómodas apariciones para presidir las sesiones del Senado.

FRENTE JUDICIAL

La relación entre Kämpfer y Boudou también ha tenido derivaciones judiciales. El juez federal Ariel Lijo mantiene bajo la lupa a la ahora ex pareja del Vicepresidente en la investigación por su supuesto enriquecimiento ilícito, y en el juzgado de Julián Ercolini también persisten las dudas por el robo de dos computadoras del auto de Boudou que ella había estacionado en Belgrano la tarde en que Argentina jugaba la final del mundial de fútbol.

Como figura clave del entorno del Vice, Kämpfer está implicada en la causa de enriquecimiento ilícito, al igual que el amigo y socio de Boudou José María Núñez Carmona. El fiscal Jorge Di Lello y el juez Lijo quieren saber si al menos alguno de ellos incrementó su patrimonio de manera indebida, para lo cual se recopiló información sobre sus gastos y movimientos financieros.

Kämpfer se ocupó, en la entrevista en la que oficializó su separación, de dejar claras algunas cosas que en los ámbitos políticos leen con atención. La primera es que mantiene una relación “de amor fraternal” con Boudou; la segunda es que siente “admiración” por la Presidenta y la tercera es que no quiere hablar de las cuestiones judiciales que involucran a Boudou y a ella misma.

Con esas aclaraciones, todo queda reducido -al menos hasta ahora- a una noticia “del corazón”.