“Nos preocupa que los chicos no puedan ir a la escuela”

“Mi hija Morena tiene que asistir este año a tercera sala del jardín de infantes Tambor de Tacuarí. No solamente no empieza las clases sino que llamamos todos los días y el teléfono no contesta, por eso nos tomamos el trabajo con mi marido de ir personalmente al jardín cada vez para averiguar, pero está cerrado siempre. Eso da mucha bronca e impotencia, porque los chicos están de rehenes de una situación de la que son ajenos. Yo entiendo que no es culpa de los docentes, que ganan poco, y que el gobierno debería darles una respuesta para que estén mejor pagos. Pero los padres ni los nenes tienen la culpa. No solamente no tenemos donde dejarlos en las horas de la escuela sino que nos preocupa que no se estén educando”.