El Gobierno afirma que “hacía inteligencia en marchas”

El gobierno nacional deslizó ayer sospechas sobre las actividades del técnico informático Diego Lagomarsino, quien facilitó el arma encontrada junto al cadáver del fiscal Alberto Nisman, al afirmar que “hacía tareas de inteligencia en marchas”.

Así lo aseguró el secretario general de la Presidencia, Aníbal Fernández, en declaraciones a la prensa en las que dijo que “empieza a preocupar la situación” del colaborador de Nisman porque, remarcó, “se ocupaba de hacer inteligencia” en “marchas de los familiares de Cromañón”.

El funcionario remarcó que “llama la atención” el rol de “alguien que no iba a la fiscalía, que prácticamente no lo conocían, que dicen que era especialista en informática y cobraba 40 mil pesos por mes”. “A lo mejor -ironizó- era un técnico especializado, sabía hacer tantas cosas y por eso cobraba lo que cobraba”.

Insistió con que “a partir de las declaraciones de” dos de los padres de víctimas de Cromañón”, “José Iglesias y Beatriz Campos, empieza a preocuparnos la situación de este señor que se ocupaba de hacer inteligencia dentro de las marchas” de los familiares de las víctimas del incendio del boliche de Once.

Iglesias y Campos declararon a la Justicia haber visto a Lagomarsino sacando fotos y recavando información durante las marchas.

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