Demoraron a un conductor que atropelló, mató y huyó en la ruta 2

Muerte por accidente. Esa fue la carátula de la causa que el sábado abrieron los policías de la comisaría de Abasto, después de que les notificaron el fallecimiento de un motociclista que horas antes habían encontrado herido sobre la Ruta 2.

Pero un llamado anónimo cambió el curso de las cosas y ayer demoraron a un joven de 27 años sospechado de haber atropellado a la víctima con una camioneta que fue secuestrada en un taller de chapa y pintura, informaron fuentes oficiales. La causa se recaratuló ahora como “homicidio culposo” y aunque resta definir la situación del imputado, lo más probable es que recupere la libertad.

La víctima fue identificada como Daniel Alberto Sibert, de 40 años y con domicilio en la localidad de Wilde, partido de Avellaneda.

Según el reporte oficial, alrededor de las 11 de la noche del último sábado policías de la comisaría Séptima fueron al kilómetro 57 de la ruta 2, por llamados al 911 que pedían ayuda para un hombre que estaba tirado sobre la cinta asfáltica.

El dato era veraz. Sibert yacía inconsciente y con gravísimas heridas, a unos metros de una moto marca Kawasaki modelo Versys, de color azul. No había ningún otro vehículo ni testigos que aclararan cómo se había accidentado la víctima, quien fue trasladada de urgencia al hospital Alejandro Korn, de Melchor Romero. Ahí falleció a las pocas horas, tras lo cual la UFI 10 de Delitos Culposos ordenó abrir una causa por “muerte por accidente” y reunir más información sobre el hecho.

Policías de la Séptima y la Distrital Oeste hicieron un relevamiento en la escena, a lo que se sumó el dato aportado por un informante anónimo. Según ese testigo, el motociclista habría sido embestido por una camioneta Chevrolet S10 de color gris y doble cabina conducida por un agricultor de nacionalidad boliviana y 27 años, que escapó sin ayudar a la víctima.

Trabajando sobre esa pista, los investigadores encabezados por Ignacio Rosales demoraron al acusado en la quinta en la que estaba trabajando y él mismo les informó que había dejado la camioneta en un taller de chapa y pintura de 208 entre 526 y 32, donde la secuestraron para peritarla, completaron las fuentes.