Detuvieron a cuatro rugbiers argentinos en Río de Janeiro

Son jugadores del club Los Cedros, de San Miguel. Le fracturaron el maxilar a un comisario

Cuatro jugadores del club de rugby Los Cedros, de la localidad bonaerense de San Miguel, fueron detenidos en la ciudad brasileña de Río de Janeiro, acusados de fracturarle el maxilar a un policía durante una pelea en un boliche, informaron fuentes del consulado argentino en esa ciudad. Sucedió el viernes a la madrugada, cuando siete miembros del equipo, que estaba de pretemporada en esa ciudad, fueron apresados a raíz de la pelea, aunque tres recuperaron la libertad.

Los incidentes ocurrieron en una discoteca del barrio de Gávea, en la zona sur de Río de Janeiro, por motivos aún no esclarecidos, aunque habrían comenzado por “algunas provocaciones” entre los argentinos y un grupo de brasileños.

El comisario Gustavo Ribeiro se implicó en la pelea, sufrió una fractura en el maxilar y la rotura de un diente, por lo que denunció por “lesiones corporales graves” y “desacato” a los jugadores de Los Cedros, que compite en el Grupo III de la Unión de Rugby de Buenos Aires (URBA). El juez Marcello Baptista ordenó la detención de los jugadores Patricio Velázquez, Hernán Gabriel González, Adrián Augusto Donato y Tomás Fernández, de entre 28 y 31 años, quienes permanecían alojados en el presidio de Bangú (ver aparte). En tanto, Ignacio Iturraspe, Matías Tapia y Fermín Ibarra, otros tres jugadores, fueron liberados en forma provisional. No podrán abandonar el país hasta que el juez lo autorice.

El magistrado justificó su decisión indicando que los detenidos “son deportistas con un porte físico superior al de un hombre medio común y practican un deporte en que el adquieren pleno conocimiento de la fuerza que pueden emplear contra otros”. Fuentes del consulado argentino en Río de Janeiro anticiparon que mañana se presentará un pedido de eximición de prisión.

Además, negaron que se tratara de una pelea entre argentinos y brasileños que el policía quiso separar, sino que aseguraron que el efectivo, que estaba de civil, estaba tomando algo con un amigo y la pelea fue directamente con él.

Por su parte, Pablo Di Nisio, entrenador del equipo y quien se encuentra en la ciudad brasileña, confirmó que permanecerá allí hasta que liberen a los jugadores.

“A mí me despertaron en el hotel avisándome lo que había pasado y los empezamos a buscar porque no sabíamos en qué comisaría estaban. No pudimos hablar con ellos porque los tenían incomunicados hasta ayer (por el viernes) a las once y media de la noche”, relató.

Según Di Nisio, la situación “no es muy clara” porque los tres jugadores que terminaron siendo excarcelados estaban afuera del boliche cuando sucedió todo y no participaron de la pelea. “Debe haber habido una discusión, ya adentro del boliche había chicanas entre los chicos que eran brasileños y argentinos. Fue una pelea entre dos o tres de cada lugar, con la desgracia de que uno de los chicos de Brasil salió lastimado y encima esa persona era policía”, sostuvo. Agregó que otro de los intervinientes en la pelea era un militar, que al igual que el policía estaba vestido de civil.

Adrián Augusto Donato
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