EE UU: la policía mató a tiros a otro afroamericano

La muerte en Baton Rouge (Louisiana) de un hombre negro a manos de policías blancos ha reabierto la herida racial en EE.UU., con protestas que reclaman el fin de la violencia policial contra la comunidad afroamericana.

“Esto es un linchamiento legal. La justicia debe prevalecer”, afirmó en su cuenta de Twitter el reverendo Jesse Jackson, ícono del movimiento por los derechos civiles de los afroamericanos durante la década de los años 50 y los 60 del siglo pasado.

Así, Jackson se hizo eco de las protestas, la rabia y la indignación que siguieron a la muerte de Alton Sterling, un hombre negro de 37 años, padre de cuatro niños y que la noche del martes tuvo un incidente con dos policías blancos, un suceso que será investigado por el Departamento de Justicia y el FBI.

En concreto, el caso será examinado por la división de derechos civiles, que investiga prácticas racistas y que ya se hizo cargo de las muertes en agosto de 2014 del joven negro Michael Brown en Ferguson (Missouri), y de Freddie Gray en Baltimore (Maryland) en abril de 2015.

El choque entre Sterling y los dos policías fue grabado con el celular de un testigo. El video, difundido en las redes sociales y canales de TV, muestra a dos agentes blancos que tiran al suelo a Sterling y, una vez que lo tienen completamente inmovilizado, uno de ellos saca lo que parece ser una pistola, la coloca en el cuello del fallecido y se oyen tiros mientras la cámara se aparta de la escena. En la secuencia, justo cuando la cámara se mueve, se oye una voz que grita: “¡Tiene un arma, un arma!”. Los policías implicados, Blane Salamoni y Howie Lake II, fueron apartados de la fuerza de manera temporal. Los dos llevaban cámaras de video pegadas al cuerpo y grabaron el suceso.

La autopsia de Sterling muestra que recibió múltiples disparos en el pecho y la espalda. El hecho se desató cuando los dos policías respondieron a una llamada de un vecino que alertaba sobre un hombre negro con una remera roja que estaba vendiendo CDs de música a la entrada de un maxikiosco y había comenzado a lanzar amenazas mientras sostenía una pistola. Los agentes respondieron a la llamada, llegaron al estacionamiento del local donde estaba el hombre, se produjo una discusión y Sterling recibió varios disparos, según detalló Carl Dabadie Jr, jefe de la policía de Baton Rouge.

El dueño del maxikiosco, Abdul Muflahi, dijo al canal WAFB-TV que uno de los agentes había empleado una pistola eléctrica contra Sterling y que el segundo policía trató de reducirlo. Mientras Sterling trataba de sacarse de encima al agente, el primer policía le disparó “de cuatro a seis veces”, dijo Muflahi. El propietario dijo que Sterling no tenía una pistola en la mano en ese momento, pero que había visto a los agentes sacar un arma del bolsillo de Sterling después del tiroteo.