Mal de ausencias, y juego

Lo que asomó como ilusión tras el arranque de la pretemporada, de a poco se fue transformando en preocupación y ocupación. Sensaciones que todavía perduran en City Bell.

Lejos de la famosa y recurrente “crisis futbolística”, el derrotero de partidos preparatorios muestra hasta el momento, a un equipo que perdió aquellos elementos positivos de 2016. Es ahora, en plena pretemporada, el tiempo de recuperarlos y así ratificar todo, para seguir siendo uno de los animadores del torneo local. Obvio que servirá también para encarar la Copa Libertadores con una base firme.

En los próximos días el country estará completo. Santiago Ascacibar, Lucas Rodríguez y Juan Foyth estarán por la cancha principal tras haber dejado atrás su participación en el Sub 20. Lucas Viatri, a punto de olvidarse de la lesión en el codo, volverá y será vital para sumarse a la generación de juego y a la definición, puntos flojos del equipo (4 goles en 8 amistosos). Toledo, un tanto relegado, también espera para pelear desde atrás. Hasta ahora el tobillo se lo impide.

En defensa las bajas de Jonatan Schunke y Sebastián Dubarbier cayeron quizás en el peor momento. La estructura defensiva se estaba acomodando luego de pasar por la guardada línea de 3, y los cuatro del fondo empezaban a salir de memoria. A Schunke se lo espera para la reanudación del torneo, mientras que el refuerzo para el lateral izquierdo tendrá unos días más de recuperación.

Sin lugar a dudas el retorno de Verón es el que marca muchas cosas a futuro. El comienzo del año encontró al Cuerpo Técnico buscando la mejor manera de ensamblar las piezas en torno a la Brujita. Pero el partido con San Lorenzo obligó a retroceder y replantear la búsqueda futbolística. En eso anda el equipo ahora, a días de la competencia oficial. Cuando Verón se encuentre a la orden será interesante ver que se define finalmente desde lo táctico. Si se para en el tradicional “doble 5” junto a otro volante central, o bien puede jugar unos metros más adelante, apuntalado por dos mediocampistas de marca. Así podría generar una buena sociedad con Solari y Rodríguez para abastecer a Viatri.

El rompecabezas de Vivas sigue con algunas piezas sueltas, y no justamente por la labor del entrenador, todo lo contrario. La búsqueda es permanente y el objetivo está más que claro. Sucede que a veces los imponderables son menores y se terminan diluyendo. No es el caso, y si bien el tiempo por delante es poco, volver a las fuentes es la prioridad más palpable y ser un equipo duro, la meta de aquí en adelante.