Fuertes ráfagas de viento castigaron a la periferia

Las fuertes ráfagas de viento que se registraron anoche provocaron algunos trastornos en la periferia de la Ciudad. 

Por caso, en la zona de El Peligro los vecinos se llevaron un gran susto cuando un eucalipto muy alto y de grueso tronco que estaba dentro de una casaquinta que funciona como espacio para fiestas cedió por el impulso del viento y al caer dio contra el paredón de una casa y lo tiró abajo. 

Durante esos instantes de “trayecto” el ejemplar derrumbó cinco postes, algunos del tendido de luz y otros del servicio de teléfonos, y dejó todos los cables en el piso.

El eucalipto quedó tirado en el piso, atravesando todo el ancho de la calle 200 (entre 404 y 406) y arrasó con la infraestructura de servicios de unos 150 metros a la redonda.

Por un rato, hasta que llegó al lugar personal de Defensa Civil de La Plata y valló toda la zona de peligro, los vecinos se vieron en riesgo porque parte de los tendidos pertenecían al sistema de distribución de Edelap y tenían electricidad, según se informó desde ese cuerpo de emergencias. 

Actuó también para prevenir cualquier inconveniente el cuartel de Bomberos de El Peligro.

Las ráfagas que se registraron, aunque duraron segundos, se repitieron en varios momentos. Tampoco fueron muy intensas, pero el impacto bastó para alertar a los efectivos de Defensa Civil, que recibieron el primer llamado, desde El Peligro, a las diez y diez de la noche.

Una de esas corrientes de viento volteó postes y cables de distintos servicios domiciliarios en 90 bis entre 21 y 22 -Villa Elvira-.

También, como consecuencia de l viento, algunos semáforos, como los instalados en 31 y 511 y en 31 y 65 terminaron “mirando” hacia otro lado y ese inconveniente causó confusión y peligro de accidente en ambas esquinas, pues hubo momentos en que la luz verde habilitaba el paso del tránsito en más de uan dirección. Tuvo que intervenir el área de Semaforización del Municipio.

Finalmente, Defensa Civil intervino por la inclinación de dos grandes ramas sobre cables en 31 entre 466 y 467. Las ramificaciones, que no alcanzaron a caer y quedaron tensadas tocando los tendidos, ya habían sufrido daños en tormentas anteriores.