Familiares y amigos, sumidos en el desconsuelo ante el peor desenlace

Escenas de profundo dolor en el hospital San Martín

Edición Impresa

A las 11,20 de ayer llegó el mensaje que nadie quería escuchar: se confirmó el fallecimiento de la ex alumna del colegio Nacional, quien estuvo cuatro días en coma profundo tras haberse disparado un balazo calibre 38 en la boca en un aula del colegio Rafael Hernández. La oficialización de la muerte de la adolescente provocó escenas de profundo pesar entre los familiares, amigos y allegados de la adolescente, que realizaban una vigilia desde el mismo 3 de agosto a la mañana.

Desde el domingo los padres de la estudiante habían pedido asistencia psicológica a las autoridades del Hospital San Martín. El estado de salud de la estudiante del colegio Nacional se agravaba con el correr de los minutos hasta que llegó una falla multiorgánica derivada del severo daño cerebral que se registró por el recorrido de la bala en su cabeza y terminó en el cielorraso del salón de clases ubicado en el segundo piso del histórico edificio de 1 y 49.

Escenas de profundo dolor se vivieron en el pasillo del hall de entrada al Hospital San Martín, donde los padres de la adolescente no encontraban consuelo. Familiares, amigos y allegados los acompañaron en el hospital.

Más tarde, y con el correr de los minutos de la mañana y el mediodía, se acercaron amigos de la familia ni bien se iban enterando de la triste noticia.

Según se pudo observar, arribaron a 1 y 70 ex compañeros de la Escuela Italiana, donde la estudiante cursó la primaria y los dos primeros años de la secundaria. Luego, en tercer año, pasó al colegio Nacional.

También se acercaron amigos del padre y de la madre de la adolescente fallecida, conformando un nutrido grupo que estuvo un largo rato en la vereda del acceso principal del Hospital.

Las escenas de profundo dolor y la búsqueda de una respuesta a tantos interrogantes que generó el fallecimiento de la alumna del colegio Nacional se multiplicaron en diferentes sectores del hospital, ya que había diferentes grupos que acompañaron a los padres de Lara en todo momento, desde el tremendo episodio ocurrido el jueves pasado.

Llantos, abrazos y mensajes para darle fortaleza a los padres de la joven fueron el denominador común de una mañana que tuvo la noticia del desenlace fatal del episodio ocurrido cuatro días atrás.

El padre de chica, visiblemente golpeado por la situación, trató de mantener el ánimo lo más fuerte posible en semejante situación y recibió en todo momento el ofrecimiento de ayuda por parte de amigos y allegados para intentar sobrellevar la angustia y la situación que provocó el fallecimiento de su hija, tras haber afrontado una agonía de cuatro días.

FALLO MULTIORGANICO

El fallecimiento se produjo por “fallo multiorgánico, producto del daño principal, cerebral. No resistió más. Tuvo dos intervenciones y luego contó con apoyo con drogas para mantener los organos, pero no aguantaron, empezaron a fallar hasta que hoy -por ayer- se produjo el fallecimiento”.

Por su parte, el director ejecutivo del Policlínico, Alberto Urban, sostuvo que “el cuadro se había tornado irreversible y tuvo fallas multiorgánicas”.

“Estamos muy tristes todos. En el fin de semana fue empeorando el cuadro de salud‘, agregó el profesional, quien añadió que no se pudo poner en marcha el protocolo de donación de órganos porque ‘nunca hubo muerte cerebral‘.

El hospital tiene un gabinete de apoyo psicológico y al pedido de los padres está trabajando con ellos, dijo la doctora Silvina González, directora asociada del Hospital San Martín.

La paciente había llegado el jueves a primera hora de la mañana, trasladada por el SAME local. Se le realizó una tomografía y luego fue sometida a dos intervenciones quirúrgicas el mismo jueves. Si bien tuvo parámetros estabilizados su estado siempre fue gravísimo, hasta que ayer se produjo el desenlace fatal.

 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE