La ONU se mudó a La Plata y casi 800 alumnos exploraron otra forma de aprender

En el 2º Modelo de Naciones Unidas los chicos se enfrentaron a “un resurgimiento del neonazismo”

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En un contexto de fuerte avance de la ultraderecha en Europa, un grupo nazi toma el gobierno de Austria y despliega el ejército por el norte de Italia. ¿Cómo reacciona la comunidad internacional?

La situación ficticia, pero con hondas raíces en el panorama político actual del viejo continente, fue el “tópico sorpresa” del II Modelo ONU organizado por el Colegio Nacional de La Plata, una suerte de juego de roles que cada año cuenta con más alumnos participantes, los cuales deben estudiar a fondo e internalizar las ideas, costumbres, posturas y necesidades del país al que representan en distintos organismos de las Naciones Unidas.

Ayer, último de los cuatro días que demandó el encuentro, por el Nacional se podían ver decenas de chicos y chicas impecablemente “vestidos de diplomáticos” e incluso con atuendos típicos en el caso de los árabes o africanos, comprometidos con sus personajes de un modo que llamó la atención.

Y es que desde hace un mes o más, los adolescentes, que participan en forma voluntaria y este año fueron 750 de 40 colegios públicos y privados de la región, empiezan a estudiar hasta el último detalle del país que les tocará representar.

“Aprendés un montón de cosas que la escuela no te ofrece, es como una capacitación”

“Desde la prosecretaría de Extensión del colegio se busca fomentar un fuerte vínculo entre establecimientos para compartir experiencias educativas innovadoras”, dijo el titular de ese área, Pablo Corbetta.

La alumna de 5º año del Nacional Eugenia Tumminiello, representante de Noruega -“el país perfecto”, definió-, subrayó que “aprendés un montón de cosas que la escuela no te ofrece, es como una capacitación. Y desde el momento en que te anotás, sabés que tenés que sacrificar horarios, conseguir recursos, porque es algo muy, muy específico”.

El año pasado, Eugenia representó a Colombia. “Es muy enriquecedor. Son modelos de naciones totalmente distintos, con niveles de desarrollo humano absolutamente dispares, y estudiar el porqué, incluso desde la historia, te brinda una visión valiosísima”.

A su lado, Laureano Varela, alumno de 6º año del Colegio Nuestra Señora del Valle y representante de Finlandia, confió que esta vez eligió Europa porque en 2016 le tocó pararse “frente a la ONU como embajador de Somalia con su conflicto. Sin embargo, el tópico sorpresa ahora cayó en Europa y es nada menos que un rebrote armado del nazismo”, apuntó y desató risas.

Todos los chicos consultados, además de coincidir en que “el panorama internacional que te brinda esta experiencia es impresionante”, acordaron en que los ayudó muchísimo a “desarrollar el lenguaje, el discurso, la oratoria, y también la escritura”, destacó el estudiante del Bachillerato de Bellas Artes Bruno Sirote, alumno de 4º año y representante de Dinamarca.

Los debates son exigentes. Las preguntas de los embajadores y delegados de los otros países, muchas veces complicadas. “Y tenés que elaborar un discurso muy convincente, ser consecuente con las ideas y posturas del país que representás, pese a que puede suceder que no las compartas”, añadió Eugenia.

Tanto se adentran en sus personajes, que durante la charla, que se desarrolló en un momento de descanso, naturalmente se pusieron a debatir entre ellos.

“Se ignoraron muchas cuestiones actuales. Ni se mencionó a Santiago Maldonado. La ONU no lo exigió”, se quejó Eugenia. “En mi opinión, fue muy amplio el panorama que hubo que abordar para puntualizar en el tema”, opinó el representante de Chipre y alumno de 4º año del Nacional, Joaquín Olmos.

Bruno arriesgó que “ciertas posturas y decisiones a tomar hubiesen generado mucha polémica y división”. “Pero un tema central de la Asamblea General (de Naciones Unidas, uno de los órganos que se conforman) es derechos humanos, me parece una ridiculez que no se haya planteado, más aún teniendo en cuenta que la sede del congreso es Argentina”, le respondió Laureano.

¿Y cómo les cayó que el tópico sorpresa sea un resurgimiento armado del nazismo?

“Muy mal”, casi exclamó Eugenia. “Acá (en los colegios preuniversitarios) tuvimos una capacitación especial a raíz de la muestra sobre Ana Frank, y saber tanto acerca del holocausto, y ahora entrar a un salón y ver la bandera nazi fue muy fuerte”.

Para Joaquín fue “interesante abordar el tema como consecuencia (ficticia) de algo que está ocurriendo en Europa, como el resurgimiento del neonazismo en Austria y Alemania y la ultraderecha en otros países”. Bruno acotó que “esto es como una advertencia de lo que podría pasar con el ascenso de la ultraderecha”. En ese momento, alguien comentó que “Portugal y República Checa se unieron al bloque nazi”: les resultaba imposible abandonar el rol. Se palpaba en el aire que el proyecto los atrapaba por completo.

crecimiento exponencial

El año pasado, del primer Modelo ONU organizado por el Colegio Nacional participaron 350 estudiantes de 30 colegios. De la segunda edición, que culminó ayer, tomaron parte -como se indicó- 750 alumnos de 40 establecimientos educativos. “La participación es voluntaria y el crecimiento exponencial. E implica mucho trabajo porque los chicos y chicas deben prepararse durante más de un mes”, contó el prosecretario de Extensión del CNLP, Pablo Corbetta.

En este simulacro educativo también hubo representantes de colegios preuniversitarios de Mar del Plata y San Juan.

El proyecto “tiene como principal objetivo preparar a los jóvenes para ejercer un liderazgo comprometido, activo y responsable, y está dirigido a estudiantes de 4º, 5º y 6º año del nivel secundario”, especificaron en 1 y 49.

 

 

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