Rendimiento opaco como el partido mismo

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Mar del Plata
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Aunque en el segundo tiempo el funcionamiento colectivo de Gimnasia se escapó de la monotonía que ofreció el partido, el balance general pone un manto de duda sobre la perfomance del Lobo anoche en el José Minella.

El primer tiempo mostró numerosos problemas del mediocampo tripero para adueñarse de la pelota y para controlar al Rojo que se venía por las bandas. Claro que el ataque del equipo de Holan, no fue nada del otro mundo y cada ataque terminó intrascendente como el partido mismo.

El ingreso de Agustín Bolívar fue un acierto de Facundo Sava, porque su inclusión equilibró el funcionamiento fundamentalmente del rombo que se formó en mitad de cancha.

Rinaudo, Colazo y Alemán se soltaron y exigieron a Independiente como no lo habían hecho en la primera parte del encuentro. El primer ensayo del Lobo en el año dejó a su gente con ganas de ver más.

 

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