Piden realizar un “simulacro urbano” para analizar el impacto de la obra de 1 y 32

Docentes e investigadores de la facultad de Arquitectura se presentaron ante el municipio por la inminencia de los trabajos

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Con la llegada de diciembre se acerca el anunciado comienzo de las obras para el paso bajo nivel de 1 y 32, y ya nada será como fue en un amplio sector limítrofe entre el casco fundacional platense y el centro histórico de Tolosa. Los cambios serán drásticos, no sólo por la eliminación de miles de metros cuadrados de espacios verdes y arboledas, sino por la interrupción del tránsito en calles que quedarán separadas por un enorme tajo en la topografía. Por este motivo, un grupo de profesionales de la facultad de Arquitectura de la UNLP solicitó formalmente a la Comuna que realice un “simulacro urbano” de 24 horas, para medir el impacto de la mega-intervención proyectada.

Entre quienes suscribieron el documento que fue presentado ante la mesa de entradas del Palacio Municipal se cuentan varias de las máximas autoridades de la casa de estudios de 47 y 117, y los titulares de muchos de sus laboratorios e institutos.

Concretamente, los arquitectos sostienen que el paso bajo nivel, planteado en el marco de la electrificación del ramal del ferrocarril Roca que une nuestra ciudad con plaza Constitución, “significará un alivio para el flujo vehicular hacia y desde la capital federal”, pero “generará cambios en el movimiento peatonal y vehicular de la zona” que “aún no son conocidos por los ciudadanos”, y deben ser estudiados y difundidos.

En ese sentido, consideran que “urgentemente”, y con antelación al inicio de los movimientos de tierra y maquinaria, se debe concretar una “experiencia urbana en tiempo real” que “permita a los vecinos, tanto permanente como ocasionales dimensionar físicamente la cuestión”.

Esta simulación implicaría escenificar, a lo largo de 24 horas “como mínimo”, una serie de cambios, asimilables con los que provocarían la construcción y el funcionamiento del paso bajo nivel cuyo diseño estuvo a cargo de la Unidad de Investigación en Ingeniería Civil, de la facultad de Ingeniería de la UNLP.

Entre las medidas que proponen los docentes e investigadores para ese montaje se cuentan la interrupción vehicular de calle 2, a la altura de 532; la interrupción del paso de los trenes, en su intersección con 32; la apertura de la calle 4 en sentido noroeste-sudeste, “a efectos de medir el incremento del tránsito en el retome hacia el interior del Casco por calle 3”; simular la presencia de nuevos semáforos; y recabar la opinión de los automovilistas “en relación con el aumento de distancia entre puntos, como de 2 y 530 a 115 y 530, donde se pasará de 200 a 800 metros”.

Algunos de los firmantes del documento son Fernando Gandolfi, titular del HITEPAC; Gustavo San Juan, del IIPAC; Luis Adriani, del CIEC; Isabel López, del CIUT; Jorge Czajkowski, del LAyHS; Emilio Sessa, del LITPA; Pablo Szelagowski, del LIP; Fabiana Carbonari, del Legrapoh; María Sánchez, del LPGE; y Gustavo Cremaschi, del LATEC.

 

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