El Real llegó a Abu Dhabi con varios jugadores tocados

Ya están todos: el plantel del Real Madrid aterrizó ayer en Abu Dhabi para meterse de lleno en el Mundial de Clubes, certamen que ganó las tres veces que lo disputó. Este año no la tendrá fácil porque no llega en un buen momento, algo que quedó claro en los últimos encuentros que disputó independientemente de los resultados.

La delegación del campeón de la última Champions League arribó a la capital de Emiratos Árabes Unidos por la noche luego de siete horas de vuelo directo desde el Aeropuerto de Barajas (Madrid). El plantel de Santiago Solari se instaló en el opulento hotel de la cadena Four Seasons y hoy se entrenará con vistas al debut del miércoles ante Kashima Antlers, por las semifinales.

Allí, el DT argentino evaluará el estado físico de varios futbolistas que llegaron a tierra árabe con molestias o inclusive algunas lesiones. Al galés Gareth Bale es al que más de cerca están siguiendo por un problema en su tobillo, aunque todo parece indicar que podrá estar presente en el compromiso frente al conjunto japonés.

También están tocados Karim Benzema y Marco Asensio, dos jugadores importantes del Merengue. Ambos sufrieron dolencias el último sábado en el partido ante el Rayo Vallecano por La Liga (fue victoria del Real con lo justo por 1-0) y en principio tendrían que llegar sin inconvenientes a la semifinal del Mundial de Clubes.

El otro que está en duda para el debut es el volante brasileño Casemiro, inactivo hace un mes por un esguince en el tobillo derecho. Solari lo probará en los próximos entrenamientos, aunque podría hacer su reaparición recién un hipotética final o partido por el tercer puesto.

Real Madrid ganó las tres ediciones del Mundial de Clubes en las que participó: en 2014 ante San Lorenzo de Almagro, en 2016 frente a Kashima Antlers (el rival del miércoles) y en 2017 contra Gremio de Brasil. Este año intentará volver a consagrarse como el mejor equipo del mundo.

EL KASHIMA ANTLERS SUEÑA CON EL BATACAZO ANTE EL REAL

Tras vencer con autoridad 3-1 a Chivas de Guadalajara el pasado sábado, el Kashima Antlers de Japón se encuentra entrenando en Abu Dhabi a la espera de la semifinal ante el Real Madrid del próximo miércoles con la ilusión de dar el gran batacazo del Mundial de Clubes y meterse en la final.

Los japoneses ya se vieron las caras con el Merengue en la final del 2016, tras dejar en el camino a Atlético Nacional (Colombia), y estuvieron a pocos minutos de conseguir la gloria. Finalmente los españoles se impusieron 4-2 en el alargue.

El presdente del equipo que comanda Solari ilusiona a los asiáticos en poder dejar, por primera vez, a un club europeo fuera de la final mundial.