Un camillero que deja el alma en el Hospital San Martín
Edición Impresa | 9 de Diciembre de 2018 | 02:44

Entre los pacientes internados en un hospital, los quemados constituyen un desafío particular. Por el alto riesgo de que se infecten, sus lesiones requieren grandes cuidados. En asistirlos durante las balneoterapias y acompañarlos a los quirófanos consiste precisamente el trabajo de Federico Onganía, quien en apenas siete años como camillero en el San Martin se ha ganado un gran reconocimiento tanto entre los pacientes como entre sus compañeros por su cariño y dedicación.
Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE