El vandalismo y los robos no encuentran freno en la Ciudad

La ola de vandalismo no encuentra freno en la Ciudad y, detrás de ella, en muchas ocasiones, se ampara la delincuencia.

Por lo general, se trata de ataques exprés, de unos pocos instantes. Rompen los vidrios de los negocios, generalmente con piedras o baldosas, entran cuando pueden y se llevan lo que tienen al alcance de la mano.

Esa situación, muy preocupante por cierto, se registró en estas últimas horas en varios locales del centro. Por ejemplo, en una fiambrería situada en la calle 11 entre 44 y 45.

En ese lugar, el propietario, Guillermo González, encontró una enorme abertura en una vidriera, por donde se colaron los ladrones.

También apareció un pedazo de mampostería, que usaron como avanzada sobre su negocio.

Se supo que algo parecido había ocurrido en una peluquería y en un local de decoración, situados a pocos metros, por lo que el temor es generalizado entre todos los comerciantes.

Además robaron en una casa que brinda servicio técnico de computación, de la calle 59 entre 6 y 7, en donde destrozaron la puerta de blíndex para apoderarse de la plata que habían dejado dentro de la caja registradora.

En 55 entre 9 y 10 le tocó a un centro de fotocopiado, en el que la mecánica fue casi calcada: primero rompieron una vidriera y después se alzaron con unos 1.000 pesos en efectivo.

En 45 entre 11 y 12, donde funciona un bazar y en 134 y 44, en una parrilla, sucedió lo mismo.

Por lo general, quienes están detrás de estos ataques son menores de edad, muchos de los cuales quedan registrados en cámaras de seguridad, pero, cuando son atrapados por la Policía, al poco tiempo recuperan la libertad y es muy alto su nivel de reincidencia.

“Es un problema gravísimo y al que no le encuentran solución”, se quejó un vecino en diálogo con este diario.

“Hay mucho descontrol y acá en La Plata no se puede ni salir a la calle”, advirtió.

MÁS INSEGURIDAD

Por su parte, en una vivienda de 137 entre 73 y 74, la situación fue un tanto más complicada, porque tres delincuentes golpearon a los dueños y escaparon en un Chevrolet Cruze, se presume, con diferentes artículos de valor.