Ovación para el Pollo Raverta, pero la despedida debe esperar

La decisión ya estaba tomada desde hacía tiempo. El Pollo Mauro Raverta había anunciado su retiro de la actividad profesional al finalizar el actual torneo, independientemente de la suerte que corriera San Carlos.

El mayor de los Raverta, volvió a jugar ayer después de mucho tiempo. Fue incluido como titular, en reemplazo de Manuel Molina, y encima, llevó la cinta de capitán.

Es que la idea del cuerpo técnico que encabeza Jorge Vivaldo era que uno de los emblemas del Celeste tuviera la despedida como se merecía. Ante su gente y en Berisso.

Sin embargo, el retiro definitivo deberá esperar porque la victoria de ayer sobre Español le dio una vida más a San Carlos.

Y el Pollo no quiere perderse por nada del mundo el partido contra Almirante Brown, del próximo sábado, porque en ese compromiso se juega el destino futbolístico y varios años de prestigio.

“Era el último partido en Berisso, de local y con la gente. Pero sabía que este club quiere un poco más. Así que queda un partido más, o tal vez dos”, dijo Mauro Raverta en diálogo con este diario.

Y agregó: “Sin dudas que el que viene es el partido más importante de los últimos años para San Carlos, después de aquella promoción con Leandro Alem de 2005, por la categoría y por lo que estaba en juego. Hoy (por ayer), les conté esa anécdota a mis compañeros, que había un grupo (el del 2005) que estuvo varios meses sin cobrar y que entrenaba prácticamente sin nada, y el objetivo de mantenernos en la categoría se pudo lograr, Esta es la batalla más difícil, porque llega en el final de la carrera. Pero como soy un tipo que cumplo con lo que dice, mi deseo es terminar bien con la Villa aunque la decisión ya esté tomada.”.

Raverta, que viste la camiseta Celeste desde hace quince años, se codeó durante todo este tiempo con los éxitos y también con las frustraciones.

“Estoy por cumplir 37 años. Y estoy jugando más con la experiencia que con el físico. Como dije, esta es una de las batallas más importantes de la carrera, y uno quiere terminarla de la mejor manera. Pase lo que pase, la decisión de retirarme está tomada. Sé que es difícil, pero en la vida hay que arriesgar. Sé que vamos a pasar el partido del sábado, y después iremos por la otra final. Estoy convencido de que no habrá una sola final, sino dos. Este triunfo nos permitió mantener la ilusión. Y esa ilusión no se apaga así nomás. Vamos a ir a jugar contra Almirante Brown con uñas y dientes, sabiendo que depende de nosotros llegar a la otra final, la de la permanencia.

OVACIÓN Y APLAUSOS

Iban 33 minutos de la parte complementaria cuando Jorge Vivaldo decidió el ingreso de Agustín Amoroso en reemplazo de Mauro Raverta. El Pollo, en el momento que salía del campo de juego, fue ovacionado por los hinchas, recibió el abrazo de sus compañeros y del propio entrenador.

Y cuando finalizó el encuentro, se unió en un abrazo interminable con Don Goro (Carlos Gorostieta) y con varios allegados que lo esperaban al costado del campo de juego.