El temporal volvió a dejar barrios aislados y seguirían las lluvias

En localidades como Sicardi, Castells y Garibaldi el barro transformó las calles en un lodazal imposible de superar para el tránsito vehicular. En Romero hubo un piquete que cortó la 520

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Sobre llovido, mojado. Y sobre las calles de tierra que todavía abundan en la periferia del casco histórico platense, un lodazal intransitable. Con la tormenta de ayer, fueron muchas las gotas que colmaron el vaso de las calzadas sin asfalto o mejorado, y miles de vecinos quedaron aislados en localidades como Villa Garibaldi, Melchor Romero, Gonnet, Parque Sicardi, El Peligro y Altos de San Lorenzo, entre otras.

Los más de treinta milímetros de precipitaciones que cayeron en algunas zonas provocaron desesperación, que se tradujo en reclamos y protestas como el piquete que mantuvo bloqueada varias horas la avenida 520 a la altura de 179.

En el marco de un sistema de tormentas que provocó serios inconvenientes en varias ciudades del país (ver página 18), las condiciones adversas en el plano local se empezaron a manifestar poco antes de las 8 y continuaron hasta pasadas las 20, entre lloviznas y chaparrones violentos.

El agua comenzó rápidamente a dejar huella y provocar trastornos. Los vecinos de 500 entre 2 y 7, en Villa Castells, manifestaron que “nuestra realidad es aún peor que la de la calle 499, que está destrozada; somos 25 familias que venimos gastando en materiales para tirar en los pozos, pero estamos hartos. Hicimos decenas de reclamos en las diferentes gestiones, pagamos prolijito todos los impuestos, pero seguimos viviendo entre cráteres y barro”.

Similares quejas se oyeron en 141 entre 34 y 36 del barrio Los Soles, en 18 y 656 de Sicardi, y en el Santa Ana -525 entre 153 y 155-, donde se dijo que “las calles jamás se terminaron, la Municipalidad nos olvidó hace años”. También en 167 de 32 a 520, y 32 entre 155 y 167. Allí se expresó que “por acá pasa un solo ramal de la línea Oeste, y cuando llueve no quiere pasar más. Hay muchos pedidos a la delegación de Romero, pero nadie se hace cargo”.

“Hace 18 años que reclamo una solución, pero como se puede ver, no la consigo” sostuvo Sara Montiel, de 201 y47: “el agua corre como un río. Ya le acerqué mi reclamo al intendente cuando vino a Olmos”. En 27 y 528, Teresa Martínez atribuyó los anegamientos a que “el pavimento que hicieron el año pasado quedó en desnivel”.

En este contexto, la Comuna informó que mantiene el Nivel de Atención del Riesgo “Amarillo” (leve) ante la continuidad de las precipitaciones. De acuerdo con los datos que recopiló la agencia hidrometeorológica municipal, los registros variaron entre los casi 40 milímetros de precipitaciones de Villa Elvira a los 10 de Gonnet, pasando por una treintena en Romero y la mitad en Los Hornos. Estos valores se seguirían abultando en las próximas horas, de acuerdo con el SMN (ver aparte).

 

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