Cuadernos y una esposa ¿despechada?, claves en la causa que investiga Bonadio

El ex chofer de Roberto Baratta, Oscar Centeno, está detenido en la Unidad Penitenciaria 29 de Comodoro Py. Y declararía hoy.

La indagatoria iba a realizarse ayer a la mañana, pero el acusado decidió cambiar de abogado. Le revocó en esta causa la representación a Norberto Frontini, un letrado con nexos con el kirchnerismo y, por ahora, tiene defensor oficial.

Una de las pruebas de la causa son ocho cuadernos que pertenecerían a Centeno y que detallan direcciones de diferentes domicilios, patentes de vehículos utilizados supuestamente para mover bolsos con dinero, cifras y fechas.

De los números consignados en estos cuadernos se puede contabilizar unos 53 millones de dólares, aunque en la causa que investiga Bonadío se habla de supuestos sobornos por más de 160 millones de dólares.

El fiscal Carlos Stornelli le ofrecerá a Centeno acogerse al programa al que ya ingresó Alejandro Vandenbroele (señalado como testaferro de Amado Boudou) y Leonardo Fariña en la causa conocida como al Ruta del Dinero K.

la ex esposa del chofer dice que lo vio con “bolsos con dinero”

El año pasado -noviembre de 2017- la ex esposa de Centeno (que figura en la causa como H.H) declaró en otra causa señalando que vio a su entonces marido “repartiendo bolsos con dinero”.

También aseguró que el chofer compró una casa en Salta y departamentos en la ciudad de Buenos Aires.

Por estas últimas adquisiciones se encuentra imputado en otra causa por enriquecimiento ilícito junto a Baratta, investigación que lleva adelante el juez Sergio Torres y la fiscal Alejandra Mangano.

El nuevo megaescándalo de corrupción revela también una historia de lealtades y traiciones, donde una vez más la protagonista central es una mujer. Como en el caso Ciccone, disparado por la ex esposa del presunto testaferro de Boudou, Alejandro Vandenbroele, Laura Muñóz, ahora es la ex mujer de un chofer la que destapa el tema de las coimas.

Muñoz contó lo que su ex marido le decía sobre aquellos negocios. Pero no tenía papeles, y mientras Vandenbroele la desmentía, todo el peso del Estado y sus agencias se habrían volcado contra ella para callarla.

Ahora es otra mujer ¿despechada?, la ex esposa del chofer de Roberto Baratta, la que destapó la olla.