“Nos pedían dólares y decían que si no se los dábamos, uno de los dos iba a morir”

El descanso nocturno de un matrimonio de italianos, él de 94 años y ella de 88, se quebró repentinamente cuando tres delincuentes armados y encapuchados irrumpieron en su casa en San Carlos y los despertaron a los gritos. Luego los ataron, amenazaron con matar a una de las víctimas y finalmente les sustrajeron alrededor de 100.000 pesos que habían ahorrado durante años, así como algunas alhajas y objetos de valor.

El episodio ocurrió en la vivienda de dos plantas ubicada en 32 y 140, donde Antonio Baglivi y Lucía Loria, nacidos en la sureña ciudad italiana de Salerno, residen desde hace 50 años.

Según se pudo establecer tras el asalto, la banda accedió al interior de ese domicilio luego de forzar la cerradura de la puerta de ingreso y rápidamente fue en busca de sus propietarios.

“SENTIMOS MUCHO MIEDO”

En diálogo con este diario en su casa, los jubilados contaron los detalles del terrible momento que les tocó padecer y que se suma a una interminable lista de casos de inseguridad que sacuden a la Región.

Antonio aseguró que “cuando estos ladrones se metieron en casa, fueron a la planta alta y al primero que despertaron fue a mí”.

Inmediatamente, para infundirle temor, le advirtieron: “Queremos los dólares, porque si no alguno de los dos se va a morir”.

Desesperado, trató de hacerles entender, como pudo, que en esa vivienda no había billetes de la moneda estadounidense. Y mientras algunos de los delincuentes elegían distintas pertenencias del matrimonio para separadas y robarlas, otro sujeto despertó a Lucía.

Ella, todavía conmocionada por lo sucedido, le contó a EL DIA que “el ladrón se abalanzó sobre mí en la cama y me ató las manos con medias. Luego agarraron a mi esposo y a él lo ataron con una sábana. Así nos dejaron acostados en la cama”.

“¿QUÉ ESTÁS HACIENDO?”

La mujer contó que “antes de que me aten, en un descuido del delincuente, quise avisar por mi celular lo que ocurría. Pero el tipo me dijo: ‘¿qué estás haciendo?’, y me sacó el celular”.

Consultados acerca de lo sustraído por los intrusos, informaron que “se llevaron cerca de 100.000 pesos que teníamos de muchos años de ahorro. También un collar, una pulsera y una radio chiquita nueva”.

Pero indicaron al mismo tiempo que “ya habían preparado más cosas para llevarse. Pero tuvieron que dejarlas porque un vecino sospechó que nos estaban robando y avisó a la Policía”.

Luego, señalaron que “se fueron a las 2 de la mañana de acá, estuvieron un par de horas revolviendo todo, dejando cosas tiradas en el piso y buscando dinero por todas partes”.

“Por suerte no nos pegaron ni nos lastimaron, pero igual sentimos mucho miedo. En esos momentos no se sabe qué puede pasar”, reflexionó Lucía.

Su esposo, en tanto, citó que “es la primera vez que nos roban en 50 años en este barrio”. Pero mostró su gran preocupación por lo ocurrido.

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