Investigan la muerte de un joven al que le habría explotado una bomba casera cuando la fabricaba

Un joven de unos 21 años de edad falleció en las últimas horas en un confuso episodio que tuvo lugar en un taller en el que, oficialmente, se llevaban adelante tareas de reparación de contenedores de basura. 

Según fuentes policiales, además de las tareas de reparación de cestos el lugar también habría servido como sitio para la fabricación de artefactos explosivos caseros. 

Así se desprende de los elementos que se hallaron en el lugar en el que se produjo el deceso, una fábrica ubicada en Dock Sud.

Además de haber encontrado los restos de una bomba hechiza que había sido detonada también se detectó la presencia de elementos que coinciden con los utilizados en la línea de producción de estos objetos incendiarios.

Se trata de caños de hierro de 3/4 cortados con igual medida, tapas de hierro con rosca, pólvora, timer color blanco y temporizadores. 

En este marco, los investigadores se centraban en la hipótesis de que la víctima, un joven identificado como Emanuel Agustín Martínez, habría estado manipulando uno de estos elementos cuando, por causas que se intentan establecer, el tubo explotó.

Las esquirlas que dispersó el elemento metálico habrían sido las causantes de las profundas heridas que sufrió en la zona abdominal y pectoral, que habrían desencadenado la muerte casi instantánea del implicado. 

Por los elementos hallados se llevó adelante un operativo en el lugar que requirió la participación de la Delegación de Explosivos La Plata, jefe de Operaciones de la Dirección de Explosivos.