El desafío de integrarse al mundo para una economía a la que le hacen falta muchos dólares

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OSVALDO GRANADOS 
osvaldoperiodista@gmail.com

Días de enojos y privaciones. Tiempos de fanáticos ciegos ante la realidad. Épocas de histerias y palabras cargadas de insultos y amenazas. La intolerancia agobia.

Me acordé de la alegoría platónica de la cueva.

Había gente encadenada en una cueva. En el interior de esa cueva arde un fuego detrás de esas personas. No pueden girar la cabeza, miran la pared desnuda. Detrás hay titiriteros que manejan objetos y marionetas delante del fuego de manera que sus sombras se reflejan en la pared. Los encadenados solo pueden ver las sombras de la pared, no lo que las provocan. Platón señala: si una persona logra liberarse, se da vuelta y ve el fuego y los titiriteros. En ese momento comprende que las sombras en la pared no son reales. Allí percibe que hay otra realidad. Mira fuera de la cueva. Regresa para explicarle a los demás lo que vio. Nadie le cree. Su realidad eran las sombras bailando en la pared.

Así estamos en la Argentina. No importan las pruebas, las confesiones y los arrepentimientos. Sólo creen lo que quieren creer.

En lo económico: ¿quién puede salvarnos?

El campo, como ocurrió en todas las crisis. Los políticos nunca lo entendieron. Cristina le debía todo a la soja y la llamaba “ese yuyito”, en forma despectiva. Utilizaron todo tipo de herramientas para succionarle la sangre.

El IAPI, las retenciones a las exportaciones, tipo de cambio diferente y la 125.

El conjunto no agrario, nacional o extranjero vive del mercado interno. Allí toma oxígeno el peronismo.

Si se elimina todo lo que no generara dólares, queda el campo, economías regionales, Vaca Muerta, el litio y la minería.

La falta de dólares genuinos provocó las crisis de 1975, 1982, 1989, 2001, 2008 y 2018.

En 1973 había 5 % de pobres, hoy 32 %.

¿Por qué no generamos divisas suficientes?

Habrá que promover exportaciones, con ayuda de empresas internacionales con más tecnificación. Hoy hay 10.000 empresas que exportan. Hace quince años eran 14.800. En investigación y desarrollo superan el promedio de la región.

Integrarse al mundo no es un fin, es un medio.

¿Qué sucede con las economías regionales?

El tipo de cambio ayuda. Pero tienen poco crédito y es caro. Los impuestos son altos y algunos costos están dolarizados.

Porcinos y ovinos, van al mercado interno. Arroz y limones, apuntan a la exportación y tienen todo para ganar.

Uvas, manzanas y peras son proveedores de exportadores.

Legumbres, porotos y garbanzos, exportan el 95 %.

El ajuste va a recaer en el sector productivo (exportadores, industriales y agropecuarios ). También sobre la clase media, que enfrentará la inflación, aumentos de tarifas y peajes, medicina prepaga, colegios etc.

Está claro, el ajuste se hace sobre los ingresos, nunca sobre los gastos.

Ningún político, Nación, provincias y municipios quiere resignar fondos. Hoy la mayoría de las provincias esta con superávit, La Nación tiene el déficit.

Durante el kirchnerismo, los gobernadores tenían que venir a Buenos Aires a mendigar de rodillas el dinero.

¿Cuál fue el cambio?

Les restituyeron a las provincias el 15 % de las retenciones para la Anses.

Alguna vez Aníbal Fernández, señalo que para gobernar el país había que tener un palo en una mano y la zanahoria en la otra. Pudieron hacerlo. Ahora los gobernadores tienen independencia. ¿Fue un error?. ¿Existe la madurez suficiente en nuestros dirigentes?. ¿Nuestros industriales están a la altura o prefieren el capitalismo de amigos?. ¿Cambio la época?

Ahora muchos están detenidos y otros procesados.

Si se fuerza la competencia, terminamos con gran parte de la Unión Industrial Argentina. Durante décadas pidieron protección, cerrar la economía y vivir con lo nuestro.

En Estados Unidos surgieron Bill Gates y Steve Jobs. En Argentina: Lazaro Baez y Calcaterra. Una pequeña diferencia.

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