Boca volvió con todo, y le hizo tres a Vélez
Edición Impresa | 3 de Septiembre de 2018 | 04:41

Boca retomó anoche el camino del éxito que había perdido frente a Estudiantes, en la fecha dos, con un triunfo de local ante Vélez, que terminó siendo más cómodo de lo que pareció en un principio, y con siete puntos en cuatro presentaciones se puso de nuevo en carrera al quedar tres escalones por debajo de Racing, que a partir de una victoria frente a Central, en Avellaneda, saltó a lo más alto del campeonato oficial de Primera, la Superliga.
El regreso de Carlos Tevez, como titular, y la presencia de Mauro Zárate en el banco de los suplentes, tratando de pasar lo más inadvertido posible para evitar reacciones que tuvieran que ver con su polémica salida del club de Liniers, la formación dispuesta por Guillermo Barros Schelotto empezó a sacar ventajas en el juego cuando se iluminó Cristian David Pavón, que esta vez si, en la Bombonera, justificó los 50 millones de dólares que el club estableció como cláusula de rescisión.
Tibio el juego de Vélez, que perdió fuerza a medida que ganó terreno en dirección al arco de Esteban Andrada, y de pronto, a los 28 minutos, Boca mostró su potencia de mitad de cancha en adelante. Salió Edwin Cardona con la pelota, buscó a Ramón Ábila recostado sobre la izquierda, pase largo, en profundidad, para la diagonal de Kichán, que no falló: a la carrera cruzó un derechazo imposible para el ecuatoriano Alexander Domínguez.
Esa jugada marcó la distancia exacta que separaba a los equipos: la velocidad. Y después que el árbitro dejara pasar un pisotón de Luis Abram a Wanchope, dentro del área, que bien pudo ser considerado penal, a los 39 Fernando Echenique se apuró a castigar con la pena máxima una falta sobre Tevez, que recibió de Pavón. Segundo penal para Boca en el torneo, que ya había tenido uno a favor contra Talleres, el que desaprovechó Carlitos, y ahora no falló Edwin Cardona.
Una cuesta demasiado pronunciada para las posibilidades de este juvenil conjunto velezano que de todas formas no resignó la idea con la que llegó a la cancha de Boca para enfrentar a un rival plagado de figuras, y un tiro libre servido desde la derecha, antes de que se fuera el primer tiempo, le permitió asustar con el descuento. La pelota viajó por arriba buscando una cabeza que la conectara, salió en falso el arquero, porque fue a buscarla y después se arrepintió, error que le permitió a Abram llegar libre aunque sin la precisión necesaria, pues salió por arriba del travesaño.
El segundo tiempo comenzó después que Zárate cruzara un saludo con Nicolás Domínguez a la pasada, cuando el volante caminaba rumbo a la cancha y Mauro al banco de los suplentes, y Vélez extendió el dominio ejercido en los minutos finales de la etapa anterior. Disponiendo de la pelota más tiempo que su rival, se aproximó con un pelotazo desde afuera de Jonathan Ramis, que se fue apenas por sobre el travesaño.
Volvió a salir rápido el Xeneize cuando se llegaba al primer cuarto de hora, esta vez con Tevez como protagonista, y aunque definió muy bien el Apache, retrocedió a tiempo el arquero para evitar el tercero con un oportuno manotazo.
Este fue el segundo penal que le dieron a Boca en el torneo, el anterior fue con Talleres como rival
Heinze buscó el milagro con los ingresos de Álvaro Barreal, Rodrigo Salinas y Jesús Méndez, mientras que Guillermo respondió cada movida recurriendo a Pablo Pérez, Darío Benedetto, que fue ovacionado en este regreso a la Bombonera, y Sebastián Villa. Terminó jugando en una pierna Leonardo Jara, y zafó Mauro Zárate, quien se quedó afuera y no se cruzó con quienes fueron compañeros suyos en la temporada anterior.
En el tramo final, lo mejor estuvo a cargo de Benedetto, quien recibió de Sebastián Villa, como delantero central, y desde la puerta del área sacó un derechazo cruzado que explotó en el travesaño tras ser desviado ligeramente por el arquero. Y cuando se jugaba tiempo de descuento, Benedetto, en vez de pegarle al arco, se la devolvió al colombiano, quien como un alfil pisó el área y sacó un derechazo alto que se metió en el primer palo. Volvió a ganar el equipo Xeneize, con ráfagas que fueron determinantes.
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