Por el nerviosismo de los ahorristas y el pulso del dólar se vivió una frenética jornada cambista en nuestra ciudad

Esteban Pérez Fernández

eperezfernandez@eldia.com

El centro de la Ciudad volvió a mostrar -después de mucho tiempo- el semblante de otras jornadas de desconcierto entre los ahorristas platenses, con el mercado financiero y los bancos como epicentro del movimiento urbano, donde desde muy temprano cientos de vecinos hicieron largas colas para ingresar a las sucursales.

La escalada del dólar, que en el mercado minorista llegó al récord de 65 pesos mientras el blue trepó en la Ciudad a $76, fue el corolario de una semana que arrancó a ritmo normal y terminó -con matices casi como en sepia, con imágenes calcadas de épocas difíciles de olvidar de la bicicleta financiera, la hiper, el corralito o el cepo.

Pero la rueda de ayer fue la más frenética. Arrancó con largas colas en los bancos y ahorristas que buscaban retirar dólares y pesos, aunque algunos, como los del banco Provincia, se encontraban con que para retirar los “verdes” daban turnos para algunos días hacia adelante.

Mientras tanto, el dólar oficial iniciaba la curva de cotización en los $63,10 con que había cerrado el jueves y el blue, en donde se cocina el pulso del mercado informal, arrancaba en $71 y transitaba los minutos subiendo y bajando de a 50 centavos, pero sin explotar. Pero a las 13.45 algo pasó y desaparecieron los vendedores del mercado. Entonces, la divisa pegó un salto de 4 peso de golpe y saltó hasta los $75 sin escalas. En la confusión, en solo 10 minutos lo pagaban a $72 y no vendían, y para el final de la jornada se acomodó en $76 para no bajar, según explicaban operadores del mercado local a EL DÍA.

“Había gente asustada retirando la plata y, el que podía, cancelando los plazos fijos. Muchos de ellos se fueron derecho y sin escalas al blue. Otros optaron por cancelar deudas”, explicaba un operador financiero platense.

En una casa de cambios de la zona de Tribunales había una cuadra y media de cola. Allí vendían dólares, euros y reales en operaciones en el mercado oficial, pero a precios un tanto superiores a los del mercado financiero, pero un poco por debajo del blue. La cola siguió durante todo el día y se extendió pasadas del 15, horario de cierre de bancos y casas de cambio.

los inversores, en alerta

Mientras el mercado descuenta un reacomodamiento de la deuda y espera por un posible desdoblamiento cambiario, los home banking de los usuarios colapsaban minuto a minuto. Y también la preocupación de inversores locales por el futuro inmediato de acciones y bonos se paseaba por los despachos de los operadores de Bolsa locales.

Al respecto, Alfredo Ariza Thomas, operador de Bolsa de Arpenta en el mercado local, explicó que “el inversor que ya está adentro con bonos o acciones no quiere salir, porque ya descuenta que habrá pérdidas, y el que está afuera no quiere entrar por la incertidumbre. Es algo lógico en un contexto como el actual”.

La “fiebre verde” de los pequeños ahorristas volvió a marcar el ritmo de un mercado cambiario local convulsionado y nervioso, que mira de reojo lo que podrá ocurrir el lunes, tras las elecciones generales, con la decisión que podría tomar el Gobierno respecto al cepo al dólar frente a un goteo de reservas que se aceleró casi dramáticamente en las últimas horas.