Madrugó y quedó a cargo

Edición Impresa

Faltaban quince minutos para las nueve de la mañana cuando María Eugenia Massi llegó hasta la mesa 1517 del industrial Albert Thomas donde tenía que votar. No era la primera vez que votaba temprano, pero fue la primera vez que, cuando llegó a emitir su sufragio, se encontró con que no había presidente de mesa, por lo que tuvo que quedarse a cumplir con esa función. María Eugenia se lo tomó con buen humor. Dejó de lado los planes que tenía para el domingo y se abocó a la tarea que le esperaba. “No es difícil: me explicaron lo que tenía que hacer y por ahora no tuve ningún problema”, le dijo María Eugenia a este diario ya en horas del mediodía. Situaciones parecidas, convertidas ya en un clásico de cada elección, se dieron ayer también en otras escuelas platenses donde otros que eligieron ir a votar a primera hora tuvieron que cambiar sus planes y presidir sus mesas.

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE