Cuelga la vincha Rambo se despide con una de narcos y trata

El héroe de acción de Sylvester Stallone estrena este jueves en los cines su quinta entrega. El actor afirma que es la última, aunque también dice que nunca se sabe...

Edición Impresa

Tras resucitar a Rocky y revivir sus días como héroe de acción en la bizarra saga “Los indestructibles”, Sylvester Stallone regresa a otro de sus personajes emblemáticos en “Rambo V: Last Blood”, que, como su título afirma, promete ser la entrega que cierre la tetralogía del indestructible boina verde.

La cinta, que se estrena este jueves en las salas locales, narra la vuelta a la violencia de John Rambo, cuya nieta desaparece al cruzar a México para una fiesta desde una localidad de Arizona, donde el héroe se encontraba viviendo en un rancho.

Es el regreso del soldado a la acción tras diez años, luego de que “Rambo IV: Regreso al Infierno” fuera recibida con entusiastas críticas y marcara el supuesto final del personaje que nació en 1982, en una cinta con guion de Stallone y dirección de Ted Kotcheff.

En esta ocasión, Stallone, que como en toda su carrera vuelve a firmar el guion, es dirigido por Adrian Grunberg, para contar una historia de actualidad, en la que se enfrenta con el crimen organizado.

Stallone es adepto a las historias de villanos latinos o rusos (la educación sentimental...), al punto de que, recordarán los fanáticos (el resto procuró olvidar aquella historia) el veterano de la Guerra de Vietnam que en la primera entrega se encuentra perdido y con evidente estrés postraumático, consumido por los demonios interiores, y se enfrenta a las fuerzas del orden estadounidenses, viaja en “Rambo II” a Vietnam, y ¿gana la guerra? Quién sabe. Por lo menos, mata vietnamitas y rusos, a quienes seguiría acribillando en “Rambo III”, que tiene lugar en la guerra afgano-soviética.

Movimiento similar hizo Rocky, de antihéroe en sus primeras dos entregas a patriota en la cuarta entrega. Pero Stallone, que también incurrió en algunas caricaturas de villanos en sus películas de “Los indestructibles” (con cierta licencia: como eran prácticamente parodias, estaba permitido utilizar los ridículos enemigos del material original) dice que esta historia de John Rambo en la frontera, entre narcos y una red de tratas, “no es una declaración de lo que está pasando entre México y Estados Unidos, es solo un escenario”.

De hecho, la mexicana Adriana Barraza, nominada al Óscar a la mejor actriz secundaria por “Babel”, quien interpreta a la compañera de Rambo, aseguró que aunque en este caso hay personajes antagónicos mexicanos, considera que otros papeles, como el suyo propio, “son mexicanos representados de una manera muy digna”.

Barraza también destacó que esta película va a ser bien recibida por el público porque “Rambo nos va a mostrar su corazón, su alma” ya que la trama está basada en la familia. “Es una historia universal porque todo el mundo entiende cómo de importante es la familia”, añadió Stallone, nacido en 1946, en Nueva York, y que consiguió torcer su destino gracias al querible Rocky, que ya lleva ocho entregas contando las propias y los “spin offs” que tienen a Adonis Creed, hijo de Apollo Creed, como protagonista.

El director coincidió con los actores y añadió que Rambo “no es solo un veterano de Vietnam”, ya que durante 40 años ha estado presente “en muchos lugares y situaciones”. Para él y para Stallone, el personaje siempre ha tenido un pie en la realidad y el resto “se puede mover”, y como “una de las realidades fuertes ahora es el tema de las drogas y el tema de la trata”, decidieron centrarlo en esta temática.

Con esta historia, que cuenta en el elenco con Oscar Jaenada, el papa de Luismi en la ficción, como villano, y que saca del retiro a Rambo, tanto delante como detrás de la pantalla (en la historia, John vive feliz y tranquilo en su rancho, con sus días de sangre detrás, hasta que le secuestran a la nieta), Stallone prometió que retiraba al atrofiado y atormentado veterano de guerra.

Ahora, sin embargo, Stallone, que ya tiene 73 años, se mostró dudoso ya que, dijo, “pensaba que la segunda sería la última, luego la tercera... No sé, creo que soy un mentiroso”.

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE