Con la venta ambulante en crecimiento, se expande la economía en negro en La Plata

En la mañana de ayer el Municipio realizó un operativo contra la venta ambulante. Entre inspectores de Control Ciudadano y agentes de la Policía se llevaron a cabo distintos rondines por la avenida 7, calle 8 y diagonal 80. Durante el procedimiento se levantaron puestos, se decomisó mercadería y se detuvo a dos jóvenes senegaleses que comercializaban diversos artículos en la vía pública. A las cinco de la tarde, en esas mismas zonas, este diario contabilizó un total de 116 puestos. Es decir, la medida no sirvió para nada.

De acuerdo al relevamiento efectuado por EL DIA, en las cuadras de la avenida 7 copadas por las mantas -de plaza Italia a la calle 54- puntualmente ayer a la tarde había 55 puestos de venta informal; en 8, desde 47 a 50, 29; a lo largo de Diagonal 80, 25. En una cuadra perpendicular a la 8, en 47 entre 7 y 8, estaban instalados 5 senegaleses con sus productos de distintos rubros y desconocida procedencia.

Medias, zapatillas, películas truchas, remeras, shorts deportivos, anteojos, juguetes, golosinas, cinturones, ojotas, carteras, billeteras, accesorios para el cabello de las nenas. De todo menos electrodomésticos se ofrece en la vía pública platense.

Las cuadras más atiborradas de mercadería extendida en el piso es la del costado de la Legislatura (7 entre 51 y 53, donde en la tarde de ayer se registró la presencia de 19 puestos), 7 entre 45 y 46 (18), y diagonal 80 entre 1 y 2 (10) y diagonal 80 entre 3 y 4 (8).

En las inmediaciones del Ioma -7 entre 41 y 42-, pero con el horario limitado por la actividad en la obra social, que atiende al público hasta las 14, también se instalan todos los días entre 4 y 5 manteros.

Otra zona donde las veredas se ocupan casi por completo con la venta ilegal son las del centro comercial de calle 12. Allí, entre dos o tres cuadras se comercializan copias de películas, frutas y verduras, quesos y fiambres, bijouterie, indumentaria infantil.

Lo distintivo del último tiempo es que en algunas de las cuadras ocupadas por manteros sacaron la venta a la calle algunos comerciantes establecidos en locales: en perchas, estantes o sistemas de sogas, según las necesidades del rubro, ocupan también un amplio espacio de la vereda. Esto sucede, principalmente, en algunas cuadras de diagonal 80, como entre 1 y 2, 3 y 4, 4 y 5 y esquina 50.

Frente al desborde de puestos instalados en la vía pública, una competencia desleal que le suma a los negocios legalmente establecidos una fuente más de pérdida en medio de un contexto económico muy desfavorable, los referentes de los distintos centros comerciales de la Ciudad buscan que se termine esa economía informal, que no tributa a los estados municipal, provincial y nacional.

Desde hace un par de meses los comerciantes vienen reuniéndose con autoridades comunales para tratar de encontrar alguna estrategia que le ponga fin a la venta ilegal. En uno de los últimos encuentros se proyectó el lanzamiento de “brigadas” para combatirla. Pero lo cierto es que son contados los operativos que se realizan y los puestos siguen copando todo el microcentro.