Por el escándalo de la colecta policial apartaron al comisario de la segunda

El escándalo que se originó con la difusión de una presunta colecta entre comerciantes del casco céntrico para armar cajas de fin de año, con comida y bebida para policías, ya le costó el puesto al comisario de la seccional segunda, Sergio Pollón, quien ayer fue reemplazado a instancias del sumario iniciado por la Auditoria General de Asuntos Internos (AGAI).

Según informaron fuentes vinculadas con la Jefatura Departamental de la Policía, el oficial fue desplazado en forma preventiva, mientras se aclara su situación con respecto a la redacción de la nota cuestionada y la circulación en los comercios de la jurisdicción de la seccional, que se extiende por Barrio Norte, el Centro y Barrio Hipódromo.

Así las cosas, mantendrá su trabajo pero pasará a desempeñar tareas en la Jefatura Departamental, informó una fuente vinculada con esa dependencia y las actuaciones internas en la Policía. La situación excede el marco policial: también se inició una causa judicial por “averiguación de ilícito” en la fiscalía penal en turno, a cargo de Virginia Bravo (UFI Nº 7).

En reemplazo de Pollón la Jefatura designó ayer a Gustavo Vilela, quien se venía desempeñando al frente de la comisaría sexta de Tolosa desde julio, cuando fue desplazado Cristian Arnau en medio de una investigación por el presunto funcionamiento de un sistema de coimas en la zona. El escándalo se desató luego de que dos oficiales mujeres chocaran con un auto que formaba parte del parque de vehículos secuestrados de la comisaría.

Además, en un allanamiento posterior a la comisaría se incautó un cuaderno con fechas, montos y nombres de aportantes.

En lugar de Vilela, la Departamental designó en Tolosa a Cristian Berhnardt, quien estaba al frente del destacamento de Barrio Aeropuerto desde hace un mes.

El corrimiento de comisarios llevó a Aeropuerto a Jorge Pérez Palacios, quien venía cubriendo una suplencia en la comisaría décimo quinta de Olmos.

La decisión se adoptó a dos días de que se hiciera pública una carta con firma y membretes oficiales en la que se solicitaba a los comerciantes el aporte de alimentos y bebidas para las cajas navideñas de 90 policías.

La particular colecta, según las versiones que corrieron junto a la difusión de la nota, se realizó en días en los que ocurrió otro episodio que dejó huella: un partido de fútbol disputado por los comisarios de la Ciudad en la cancha principal de Gimnasia y Esgrima de La Plata, el sábado 21. El encuentro, facilitado por un préstamo de las instalaciones por parte de las autoridades del club, hasta contó con asistencia de un preparador físico del staff de Gimnasia.

Siempre según las versiones extra oficiales la denominada “Copa Camaradería”, que reunió en el campo usado en la Superliga a titulares de comisarías y funcionarios de la Jefatura Departamental fue el punto culminante de jornadas en las que la presunta colecta se había extendido por varias jurisdicciones de la Ciudad.

En la misma línea, se había señalado que la nota por la que ahora se puso bajo la lupa a Pollón también llevaba firmas de otros comisarios y quienes la portaban eran agentes que no pertenecían a la comisaría de la zona. Eso, con el aparente objetivo de que no fueran reconocidos por los destinatarios de la misiva.

Desde la Departamental se rechazó esa versión. Se dijo durante el pasado fin de semana que solo se detectó una nota. Ahora se sabe que las marcas de identificación conducirían al comisario Pollón.

El policía, por su parte, rechaza esa acusación y niega haber escrito y firmado la carta. Incluso, aseguró que tiene las facturas con lo que pagó por los alimentos en un hipermercado de Tolosa.

En tanto, las autoridades policiales de la región también indicaron que el picadito de fútbol en la cancha de Gimnasia se organizó a partir de la cesión de las instalaciones por parte del Club. Eso derivó del vínculo establecido por los operativos en los que participan los comisarios. Varios, son hinchas de Gimnasia.