El Camino Negro: el escenario del delito que completa un panorama desolador

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Otra noticia muy fuerte que apareció vinculada a Villa Elisa en todos los medios nacionales fue el hallazgo del cuerpo de Gissella Solís Calle, la odontóloga de 47 años de la que no se supo nada durante dos semanas. Su cadáver, aparentemente envenenado, lo encontraron enterrado a la vera del Camino Negro, que une la localidad del Norte con Boca Cerrada, en Punta Lara.

El caso conmocionó a la opinión pública e, idefectiblemente, volvió a dejar en claro algo que ya viene denunciando la gente de la zona: “Da la impresión de que por ese camino, totalmente destruido, puede pasar cualquier cosa”.

La ruta Provincial 19 tiene una extensión de 8 kilómetros en los que debería cumplir el cometido de unir Villa Elisa con Punta Lara. Es el mejor acceso, desde el extremo norte del distrito y el sur del Conurbano, a un centro de recreación capaz de reunir 50 mil personas en una tarde. Pero nadie puede usarlo.

El descuido y mal estado “tradicional” de la traza se agudizó en los últimos años hasta volverla intransitable. Los pozos prácticamente impiden moverse a los vehículos y la vegetación crece todo lo que puede hasta devorarse la calzada en algunos tramos. A esa actividad de la naturaleza en un sitio protegido solo le compiten la mano de quienes la usan como basurero o escenario del delito y la muerte.

 

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