Frigerio admitió que son "tremendamente difíciles" de solucionar los "problemas estructurales" del país

El funcionario se refirió a la situación económica y social de la Argentina durante una entrevista radial


El ministro de Interior, Rogelio Frigerio, admitió hoy el "error de creer que los problemas se resuelven en una gestión de gobierno", al afirmar que se están "sentando las bases" del "cambio estructural" que necesita el país para dejar atrás la crisis.

"Estamos sentando las bases de ese cambio estructural que necesita Argentina, pero eso tarda, y ése fue nuestro principal error: creer que esos problemas se resuelven en una gestión de gobierno", declaró a la radio Mitre.

Agregó que "son tremendamente difíciles" de solucionar "los problemas estructurales que tiene la Argentina", por lo que se "necesita tiempo".

El ministro reconoció también que "es difícil pedir a una sociedad tan sufrida como la argentina" más tiempo.

Recordó que "en abril se va cumplir un año del inicio de la crisis y la recesión", primero con el cierre del crédito a la región y luego con la peor sequía de los últimos cincuenta años. 

Dijo que con el objetivo de mejorar esta situación se elaboró "un presupuesto equilibrado" mientras se continúa trabajando "para solucionar los problemas que más le quitan el sueño a los compatriotas".

Frigerio asumió que "la política monetaria por lo menos tarda seis meses en dar resultados" y admitió que "la volatilidad cambiaría es algo que preocupa a los argentinos, como también la inflación, y no de ahora, sino de siempre".

"Si cada tres años hay una corrida cambiaría, si cada diez una gran crisis, por supuesto los argentinos estamos siempre preocupados por el dólar, la inflación y la marcha de la economía", puntualizó.

También apuntó a pensar "otra estructura productiva", para dejar que el país deje de ser "el granero del mundo" y transformarlo "en el supermercado del mundo".

A pesar de la crisis, el Gobierno sigue invirtiendo en obras públicas que le mejoren la vida a la gente, sostuvo Frigerio al remarcar que ahora "el gasto social es el más alto de la historia", aunque admitió que hay "millones de argentinos que están pasando una situación angustiante" a causa de la crisis.

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