Aplicaciones para pasear en bicicleta y no perderse en el intento

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Por STEFAN WEISSENBORN

Agencia DPA

Los ciclistas son cada vez más. Y no sólo les gusta moverse al aire libre en la ciudad. También disfrutan de recorridos en bicicleta, sea durante un fin de semana o unas vacaciones. Para orientarse tienen dos opciones: las Apps, ideales para andar en la ciudad, o los sistemas de navegación, perfectos para trayectos más largos. Ambos pueden ser de gran ayuda. Al pedalear en terreno desconocido, uno no tiene la orientación de siempre, y la tecnología probablemente pierda menos el rumbo que el ciclista.

“Para los caminos de todos los días, dentro de una ciudad, las Apps de los móviles son muy buenas”, dice René Filippek, de un club de ciclistas alemán. “Lo bueno es que no hay que estar cargando ningún aparato adicional”, comenta.

“Además, las aplicaciones se nutren de los datos guardados de cientos de usuarios, y eso es muy útil en ciudades que uno no conoce”, explica David Kossmann, fan de las rutas en dos ruedas. Muchos móviles cuentan con una pantalla bastante grande, y eso los convierte en una herramienta ideal para ver mapas a medida que uno va avanzando.

La gran desventaja es que esas pantallas y las aplicaciones consumen muchísima batería. Por eso, cuando se hacen trayectos más largos, lo ideal es partir con un buen sistema de navegación. Suelen tener baterías de mayor capacidad y ofrecer mejores opciones para planear una ruta. Además, se venden con un soporte especial.

Los navegadores suelen ser robustos y resistentes a las caídas. No es tan grave si se cae del manubrio. Su pantalla, a diferencia de la del móvil, suele estar preparada para la intemperie. No es un dato menor. Así como los móviles pueden resultar sumamente molestos porque reflejan la luz si les cae de determinada manera, los navegadores cuentan con pantallas transflectivas, y eso hace que se pueda leer muy bien incluso bajo la luz directa del sol.

Una revista alemana especializada en el tema se tomó el trabajo de analizar varios de los sistemas de navegación que hay en el mercado y notó que algunos sistemas no sólo ofrecen la posibilidad de planear rutas de acuerdo al destino y a los puntos que uno quiera recorrer, sino también de acuerdo a cuánto uno esté dispuesto a pedalear.

Muchos dispositivos permiten armar recorridos con direcciones, puntos del mapa, coordenadas o “points-of-interest” (POI), que pueden ser restaurantes, hoteles o incluso tiendas con herramientas de reparación ante una emergencia.

Pero si se trata de un recorrido largo, Kossmann recomienda ver la ruta en la computadora, en casa. Hoy todo está interconectado. El navegador comunica con el móvil y también se puede interconectar a la bici para que mida la frecuencia de pedaleo u otros parámetros de esfuerzo y rendimiento, Claro que también se puede hacer todo distinto. Salir, dejar que el aire sople y disfrutar los paisajes desconocidos.

 

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