Por el crimen de la argentina en México cayó su mucama

Era abogada y vivía desde hace varios años en la capital de ese país. Apareció muerta en su casa. Creen que fue víctima de un robo

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A pocas horas de descubrirse el crimen de la abogada argentina María Marta Bazán, la policía avanzó sobre una trama criminal en la que quedó como sospechosa la empleada doméstica de su casa del barrio Atizapán de Zaragoza, en la ciudad de México.

La mujer fue detenida por su presunta participación del homicidio con fines de robo, por el que también se busca a otros dos hombres, informaron fuentes diplomáticas.

Una amiga de la víctima que también vivió más de 20 años en ese país aseguró en declaraciones a la prensa que la mujer apresada “confesó” su participación en el crimen.

Por tratarse de una ciudadana argentina, las autoridades de la Embajada que tiene a su cargo el embajador Ezequiel Sabor asistieron a su familia y permanecen ahora en contacto con la madre de Bazán, que arribó a México en las últimas horas.

“Ya llegó la madre y se colabora con ella para que pueda realizar los trámites rápidamente”, agregó el embajador, quien dijo que por el momento la familia no solicitó repatriar los restos de la abogada, quien residía desde hace muchos años en México con sus dos hijos adolescentes.

“Ella fue, como todas las mañanas, a la entrada del condominio, que tiene vigilancia, para dejar a sus hijos en las combis que los llevan a cada uno a su escuela y cuando regresó se encontró con la empleada doméstica atada y dos tipos en la casa”, relató Florencia Rodríguez Lastra, amiga de María Marta y quien residió 27 años en México.

“Aparentemente empezaron a forcejear y ella parece que gritó, y uno de ellos la ahorcó y la mató”, indicó la mujer, quien agregó que uno de los asesinos “salió en el auto” de la víctima “con cosas robadas en la cajuela”. En el puesto de vigilancia lo frenaron pero salió corriendo. Se sospecha que el otro ladrón también corrió.

Según Rodríguez Lastra, los asesinos “entraron con la autorización de la empleada” y en su celular “tenían fotos de la casa”, las “mismas” que se hallaron en el de la empleada, quien finalmente habría confesado el vínculo.

 

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