Abandono, poco contacto diario con la escuela y falta de recursos tecnológicos

Un relevamiento municipal afirma que 2 de cada 5 alumnos de 6º año del secundario dejaron la escolaridad en esas zonas

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Números preocupantes refleja un relevamiento realizado en Los Hornos, Tolosa y de la Ciudad: dos de cada cinco adolescentes que cursan sexto año de la secundaria abandonaron el colegio, dos de cada diez alumnos tienen contacto diario con la escuela y más del 50 por ciento de los encuestados asegura que no tiene recursos tecnológicos necesarios para mantener una continuidad educativa.

El trabajo fue llevado a cabo a más de 200 días de aislamiento social, preventivo y obligatorio. Se entrevistó a 348 familias y se generaron vínculos con 725 niños, niñas y adolescentes, de los cuales 604 se encuentran en edad escolar.

“Podemos afirmar que los niños, niñas y adolescentes de los barrios más vulnerables de la ciudad son los más perjudicados por la paralización de las clases presenciales”, afirmó Julieta Quintero Chasman, responsable de la secretaría de Desarrollo de la Comunidad municipal; al tiempo que remarcó: “Es necesario encarar una apertura gradual de las instituciones educativas, con los correspondientes protocolos, antes de que el daño sea irreversible”.

Según el informe, que también evaluó las condiciones de vida, el nivel de ingresos y la situación laboral de los 348 hogares censados el 5,4 por ciento de los niños, niñas y adolescentes no está inscripto en ningún establecimiento educativo; y sólo el 27, 5 por ciento de los que sí pertenecen al sistema educativo mantiene un contacto diario con la institución durante el ASPO.

De los chicos anotados en una institución, el 17.8 por ciento manifestó no tener contacto actual, precisó el informe. En esa línea, y respecto a la frecuencia del mismo, se puntualizó que el “44,6 por ciento manifestó tener contacto semanal con la escuela; el 27,5 por ciento diario; el 23,6 por ciento, esporádico; y un 4,3 por ciento restante nulo”.

También se desprende que de los niños, niñas y adolescentes que tienen contacto con el establecimiento educativo, el 41 por ciento tiene clases, mientras que el otro 37 por ciento sólo entrega cuadernillo con tareas, y el restante 21 por ciento manifiesta tener ‘otro tipo de contacto’ (llamados telefónicos y mensajería por WhatsApp”, se explicó.

En relación a la presencia de dispositivos tecnológicos para mantener un vínculo virtual con los docentes y generar cierta continuidad educativa durante el aislamiento, el 73 por ciento de los hogares relevados cuenta con un celular; el 15 por ciento, con una computadora; y un 12 por ciento con ninguno.

Para el 43 por ciento de los padres y madres entrevistados sus hijos e hijas no están aprendiendo contenidos durante el ASPO; y en el informe se asegura que “el 52,4% de los alumnos no sostiene una continuidad educativa en este momento”, se indicó.

ESCUELAS RELIGIOSAS PIDEN LA PRESENCIALIDAD

Por su parte, la Comisión Directiva de la Federación de Asociaciones Educativas Religiosas de la Argentina (Faera) instó a distintos sectores a “cooperar” para poder acelerar el regreso parcial a la actividad educativa presencial anunciada por el Ministerio de Educación de la Nación.

“Llevamos siete meses de actividad remota que en un gran porcentaje y por diversas causas no ha podido ser sincrónica y sostenida, se ve afectada cada vez más la salud integral de niños, niñas y adolescentes, y acentuándose en esta segunda parte del ciclo escolar. Por estos motivos es urgente considerar que la actividad educativa es esencial”, advirtió en una declaración.

Faera reconoció que el futuro próximo será “en convivencia con el COVID-19”, pero reitera su llamado urgente a “considerar la situación de niños, niñas y adolescentes que hace ya siete meses que están en situación de aislamiento y sufren distintos tipos de dolencias que influyen en su normal desarrollo físico, psíquico, intelectual y espiritual”.

 

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