El alivio de Juanita al terminar el año de TV: “Vayanse todos a la...”

La conductora que reemplaza a su abuela Mirtha en la mesa de El Trece se mostró muy feliz por el cierre de temporada

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Juanita Viale se sentó este fin de semana, por última vez en este 2020, en la mesa de su abuela Mirtha Legrand, en dos envíos, el sábado y ayer, marcados por el humor y la euforia de dejar la temporada atrás.

Es que fue un año duro, incluso para Juanita: fue su año consagración, luego de tomar la posta de la conducción de los almuerzos y cenas de La Chiqui, recluida por el COVID, pero también fue una temporada de miedo para todos, en la que sufrió la muerte de su tía abuela Goldy. Quizás por eso, ayer, en “Almorzando con Mirtha Legrand”, la actriz y conductora ingresó al estudio con “Par-Tusa” de El Dipy, y no paró de bailar por unos minutos, mostrando su alegría de haber llevado adelante satisfactoriamente la animación del ciclo más longevo de la televisión.

O, más que alegría, alivio: “Ya está, terminamos, váyanse todos a la...”, disparó la joven conductora, sorprendiendo a todos por el exabrupto. “Muchas gracias a todo este equipo maravilloso por haberme hecho el aguante de algo que no sabía hacer al principio”, continuó.

“No saben lo que significa estar detrás de cámara con una mina que no sabía preguntar. Era imposible sin hacerlo sin todos ellos”, manifestó Viale haciendo un autocrítica de la cual con el paso de los meses fue consolidándose en el rol que le tocó encarar en este difícil 2020.

En una serie de programas donde hubo lugar para la emoción y donde la nietísima contó cómo se había enamorado de su pareja (“me enamoré como una estúpida desde el primer día”, contó, y relató que tiene un pequeño inconveniente: él es hincha de River y ella de Boca, ¡justo en este momento de los dos equipos grandes!) Juanita se mostró más descontracturada que nunca, incluso, cerró de particular forma el show del domingo: se dirigió a un rincón del estudio en el que la esperaba un biombo y reapareció con una pollera de jean, una remera y con sus pies descalzos dando por terminado el ciclo. “Esto es lo que soy yo. Esta es Juana Viale. Esto es un poco de lo que no mostré. Muchas gracias por acompañarme, la vida va a mejorar”, cerró y con un silbido hizo entrar a su perra Tota.

El año que viene, cuando arranquen los almuerzos, se espera que ya conduzca Mirtha. ¿Qué hará Juanita?

 

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