La Provincia decide si permite salidas recreativas en la nueva cuarentena

Lo analizará hoy el gobierno de Kicillof. La flexibilización será sólo para ciudades de menos de 500 mil habitantes y sin circulación del coronavirus. Las clases siguen suspendidas en todos los niveles y las fronteras siguen cerradas

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El presidente Alberto Fernández, anunció anoche una nueva etapa de la cuarentena que se extenderá hasta el 10 de mayo y que será más flexible en algunos distritos del interior con escasa circulación del virus. Los anuncios del Presidente, en tanto, establecieron que a partir del lunes en las ciudades de “más de 500 mil habitantes seguirán las restricciones como hasta hoy” y las localidades con menor cantidad de población “pueden empezar a ser exceptuados”, pero deben cumplir una serie de requisitos establecidos por el Gobierno nacional.

En la nueva etapa, según dijo el presidente, “se podrá salir en un radio de hasta 500 metros, una hora por día, incluido los que integran los grupos de riesgo”.

“Se podrá salir un rato de la casa, una hora por día y en un radio de hasta 500 metros, con fines de esparcimiento”, dijo el mandatario al anunciar la continuidad del aislamiento.

Fuentes oficiales precisaron que “el permiso de salida de una hora rige en todo el país, inclusive para los grupos de riesgo”.

La medida, sin embargo, hasta anoche no había sido aceptada ni por la Provincia de Buenos Aires, ni por la Municipalidad de La Plata.

Voceros del gobernador Kicillof le dijeron a EL DIA que hoy se analizará el texto del decreto presidencial para adoptar una decisión. “Pero, hasta el momento, en la Provincia no cambió nada. Estamos con las mismas restricciones que el viernes”, dijo ante la consulta de EL DIA un vocero de estrecho contacto con el gobernador.

En la nueva etapa de la cuarentena, según aseguró el Presidente, los gobernadores podrán disponer excepciones al cumplimiento de las medidas de aislamiento en ciudades con menos de 500 mil habitantes, cuando se den cinco condiciones, entre ellas que el tiempo de duplicación de los casos no sea menor a 15 días, e indicó que las autoridades provinciales deberán “mantener informado al Gobierno nacional en forma permanente”.

Precisó que en los grandes conglomerados urbanos con más de 500.000 habitantes -como la ciudad de Buenos Aires, Gran Buenos Aires, Gran La Plata, Rosario, Córdoba, Tucumán y Santa Fe- “la cuarentena seguirá como hasta ahora”.

En tanto, en el resto de los conglomerados, de menos de 500.0000 habitantes, la apertura será siguiendo determinadas normas que estarán bajo control de las provincias, acorde a protocolos y con seguimiento permanente del gobierno nacional, según aclaró.

“Los de menos de 500 mil habitantes pueden empezar exceptuados. Esta decisión está en mano de las autoridades provinciales”, especificó el mandatario en su exposición.

Las cinco condiciones que necesariamente tienen que darse, de manera simultánea, para que los gobernadores puedan avanzar en ese sentido son: Tiempo de duplicación de casos confirmados inferior a quince días; sistema de salud con capacidad adecuada para dar respuesta; evaluación positiva de las autoridades sanitarias respecto al riesgo socio-sanitario en relación con la densidad poblacional; el porcentaje de la población exceptuada de las medidas de aislamiento no podrá superar el 50 por ciento de la población total del departamento o partido; la zona geográfica no podrá estar definida como “con transmisión local o por conglomerado” por la autoridad sanitaria nacional.

“Si se dan los cinco requisitos, lo que puede hacer la autoridad provincial es habilitar la vuelta a la actividad con los protocolos adecuados. A partir de allí, tiene que mantener informado al gobierno nacional de cómo evolucionan los casos y, si en algún caso los números se desbordan y alguna de estas exigencias dejan de darse, nosotros vamos a poder dar marcha atrás con la decisión provincial y exigir que se vuelva al período previo de la cuarentena administrada”, precisó Fernández.

Según explicó, la vuelta a la actividad se debe realizar con “protocolos”, y se debe “informar la evolución de los casos” al gobierno nacional “en forma “permanente”.

“Tenemos previstas dos etapas más hasta llegar al final del tiempo en que todo quede liberado”

“Dejamos en manos de autoridades provinciales el manejo de qué actividades se pueden abrir”

“Vamos a seguir sin clases, sin la administración pública y sin actividades recreativas ni espectáculos”

 

“Estamos lejos de decir que esto está terminado”, dijo Fernández y destacó que “hemos avanzado mucho” pero advirtió que esto “no quiere decir que está resuelto el tema”.

El Presidente afirmó, además, que el gobierno trabaja en un plan económico que permita recuperar el nivel de actividad apenas termine la cuarentena y pidió a los empresarios que tomen todos los recaudos necesarios para minimizar las posibilidad de contacto de los trabajadores que están cumpliendo sus tareas en la actualidad.

Señaló que estuvo reunido con el ministro de Economía, Martín Guzmán, y con el titular del Banco Central, Miguel Angel Pesce, con el objetivo de seguir implementando las medidas necesarias para paliar los efectos económicos derivados de la pandemia.

“Prefiero que una fábrica no trabaje porque sus empleados están en cuarentena y no porque sus empleados están enfermos”, aseveró.

“Por lo tanto, toda actividad que se inicia, y acá déjenme hablar de los empresarios, les pido que tomen los recaudos necesarios para minimizar las posibilidades de contacto” de sus trabajadores, resaltó.

Entre las actividades que continuarán suspendidas se incluye el dictado de clases presenciales en todos los niveles y modalidades. Tampoco se autorizarán eventos públicos y privados tanto del ámbito social, como los culturales, recreativos, deportivos y religiosos, entre otros. Los centros comerciales, cines, teatros, centros culturales, bibliotecas, museos, restaurantes, bares, gimnasios, clubes y cualquier espacio público o privado, seguirán cerrados. No se autorizan las actividades turísticas, ni la apertura de parques, plazas y similares.

Las fronteras seguirán cerradas para el ingreso de extranjeros, mientras que el ingreso de los residentes continuará en los términos que sean compatibles con el control sanitario. El transporte de pasajeros aéreo de cabotaje e internacional, terrestre interurbano, entre jurisdicciones e internacional continúan sin autorización para funcionar.

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