Barrían las hojas de la vereda y fueron víctimas de una violenta entradera

Les pasó a un hombre y a su hija. Cuatro ladrones les pegaron, los tiraron al piso y huyeron con 10 mil pesos, en una camioneta 4x4

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En un sector de Gonnet los vecinos están “muy preocupados” por una serie de atracos que se volvieron recurrentes en las últimas semanas. La mayoría de los hechos, expusieron, son cometidos durante el día. Esa situación, extraña si se compara con la realidad que se vive en otros barrios de La Plata, tiene un argumento: “El tema es que a la noche la Policía patrulla y hay muy poca gente en la calle, entonces aprovechan para sorprendernos el resto” de la jornada, señalaron en la vecindad.

El último de los casos ocurrió ayer por la tarde -entre las 17.40 y las 18 horas- en 490 entre 16 bis y 17. Las víctimas fueron un hombre y su hija, a quienes golpearon con un salvajismo inusitado que le causó al padre diversas lesiones por las que tuvo que ser trasladado a un hospital, confirmaron los protagonistas del caso.

Según pudo saber EL DIA, padre e hija estaban ocupados en barrer las hojas que se habían acumulado en la vereda, de modo que no vieron llegar a los delincuentes. Eran cuatro y se sospecha que se trasladaban en una camioneta negra de vidrios polarizados que fue registrada por las cámaras de seguridad instaladas en la zona.

El hermano de la joven refirió que “la agarraron de atrás, le taparon la boca y la metieron adentro” y que fueron “muy violentos” durante todo el tiempo que duró la entradera. Una vez que los tuvieron en el interior de la finca y con la situación controlada, los ladrones no ahorraron en brutalidad. Una fuente señaló que “los tiraron al piso, los patearon y también les pegaron con las armas”.

Como suele suceder en estos hechos, unos exigían “la plata” mientras el resto buscaba habitación por habitación algún elemento de valor. Entre lo sustraído habría 10 mil pesos en efectivo, celulares y otras pertenencias. Con ese botín, dejaron a los damnificados heridos y aturdidos, mientras escapaban de la escena.

Cuando pudieron recuperarse, las víctimas dieron aviso a las autoridades y al resto de la familia, que en segundos llegó al lugar.

En uno de los canteros del frente de la casa los efectivos policiales hallaron una gorra con visera de color azul, que sospechan sería de alguno de los malvivientes.

Como se dijo, una ambulancia trasladó al dueño de casa a un sanatorio, aunque su vida no estaría en peligro. En tanto, el hijo manifestó que “en la esquina robaron hace unos días a las 13, pareciera que con la misma modalidad”.

 

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