Robaron el caballo de un chico con retraso madurativo, en Olmos

Seguramente quienes robaron a Moro, el caballo de una familia que vive en un campo con criadero de pollos en Olmos, desconocen que el animal es mucho más que una mascota para un menor de 13 años con retraso madurativo y para quien el cotidiano contacto con este equino es vital para el tratamiento terapéutico que viene desarrollando. O lo saben y no les importa.

El caballo desapareció en los primeros minutos del jueves de su corral en un lote de 208 y 38, en momentos en que sus dueños dormían.

Desde entonces es buscado con desesperación por los familiares de Isaías, el adolescente en cuestión, a través de las redes sociales e inclusive por intermedio de un portal de noticias de Olmos.

Sin embargo, la angustia para todos ellos se agiganta paulatinamente por la falta de pistas que conduzcan hasta donde puedan tener oculto a Moro.

Peor aún: los padres de Isaías sospechan, a esta altura, que los delincuentes que lo robaron pueden haber matado a su mascota.

Hay una denuncia radicada por este ilícito y una investigación policial que los damnificados esperan que finalice con el equino nuevamente junto a sus propietarios y así poner fin a su angustia, especialmente la que padece ahora Isaías.

“SE ENCARIÑÓ Y ESTÁ MUY TRISTE”

Cintia Defeis (35), mamá de este adolescente, le contó a EL DIA cómo la desaparición de Moro afecta principalmente a Isaías, el mayor de sus tres hijos (también tiene a una nena de 10 años y un varoncito de 3).

“Isaías se encariñó mucho con Moro y ahora está muy triste. Todo el tiempo nos pregunta dónde está y si va a volver a verlo”. Es que, según contó Cintia, su hijo interactuaba mucho con su caballo, al que a diario visitaba en el corral de donde lo robaron, que está 1.000 metros para adentro, desde la tranquera de entrada a la propiedad de la familia.

Sobre el caballito, comentó Cintia que su cuñada se lo regaló a Isaías en febrero pasado, “sabiendo que iba a ser muy útil para el tratamiento terapéutico que sigue (ocupacional)”, con una psiquiatra.

También aportó sobre Moro que “tiene entre 10 y 12 años. Es un animal muy manso y lo extrañamos todos, inclusive mis otros dos hijos”.

Consultada sobre el momento en que constataron que al equino se lo llevaron por la fuerza de su corral, Cintia recordó que su marido se levantó y salió a ver por qué ladraban tanto los perros, pero “miró y no había nadie y recién a la mañana (del jueves) nos dimos cuenta de que Moro ya no estaba en su lugar”.

“ANDAN ROBANDO CABALLOS”

En otro pasaje de su charla con este diario, Cintia puso énfasis en hacer público que en su zona “andan robando caballos desde hace un tiempo” y completó: “Ahora nos tocó a nosotros”.

También mencionó que “por ahora no tenemos novedades sobre la búsqueda que está haciendo la Policía para encontrarlo”.

La situación los mantiene sumidos en la incertidumbre, pero lo que a esta familia más le preocupa es la imperiosa necesidad que tiene Isaías de reencontrarse con su caballo.

“Tratamos de calmarle la ansiedad, de que no esté tan afectado emocionalmente, pero es difícil. Siente su ausencia y lo pone mal”, citó. Pidió que cualquier novedad sobre Moro “nos llamen al 221 637-4384 o al 221 459-6151”.