El Gobierno da marcha atrás y anuncia la eliminación del cepo a las exportaciones de maíz

En medio del cese de comercialización de granos impulsado por la Mesa de Enlace del campo en rechazo a las restricciones a la exportación de maíz, el Gobierno decidió ayer dar marcha atrás con la medida y eliminar cualquier tipo de cepo. Pero el paro por 72 horas -que empezó el lunes y finaliza hoy- “no se levanta. El paro sigue”, advertían ayer desde Confederaciones Rurales Argentinas , entidad que ratificó la medida de fuerza junto a la Sociedad Rural Argentina y la Federación Agraria Argentina.

“El cese termina mañana [por hoy]. Vamos a seguir hasta que veamos la resolución oficial firmada, publicada y operativa”, insistían en la Mesa de Enlace tras el comunicado del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca que anunciaba la sustitución del límite de 30 mil toneladas diarias de exportación “por un monitoreo del saldo exportable para llegar al empalme de cosecha sin tensiones, con el compromiso del sector privado”.

La decisión, precisó el texto oficial, fue el producto de “un acuerdo con el Consejo Agroindustrial Argentino (CAA) que asegura el abastecimiento interno del grano” y llegó luego de una reunión encabezada por el ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca, Luis Basterra, con los representantes de la mesa intersectorial del maíz.

Allí, consensuaron además un acuerdo de largo plazo con los sectores consumidores y proveedores de maíz, para constituir un fideicomiso de larga duración como solución y método de desacople entre el mercado internacional y el de abastecimiento a transformadores de maíz.

También, se dispondrá de una herramienta para garantizar la cobranza de los vendedores de maíz en tiempo y forma; mientras que a su vez se analizaron alternativas como líneas de créditos a tasas subsidiadas.

La eliminación del coto a las exportaciones de maíz era la condición impuesta por los productores para levantar un paro que se presentó como la síntesis de una “bronca contenida” contra el Gobierno . Pero antes, el sector pretende que la promesa anunciada ayer se haga efectiva.

Ya en la madrugada del lunes, cuando se iniciaba el paro, el Gobierno había flexibilizado las restricciones autorizando un cupo de exportación de 30 mil toneladas de maíz por día. Una reapertura parcial que el campo rechazó, “porque no queremos ningún tipo de intervención, no queremos volver a las medidas usuales de los gobiernos kirchneristas; el malestar es muy grande”, decía ayer, antes del anuncio oficial, el titular de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap), Matías de Velazco.

Tras el compromiso oficial -celebrado por algunas entidades agropecuarias- la expectativa pasa ahora por la decisión que tomará la Mesa de Enlace, que se reúne hoy para definir los pasos a seguir.