Unidos por sus estadías en distintos penales de la Provincia

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Los tres hombres involucrados en la increíble historia de los 34 kilos de cocaína en el río tienen antecedentes penales, aunque “Naco Goldfinger” es quizás el más pintoresco de todos, por su pasado con los Fabulosos Cadillacs y también por su prontuario.

Tras ser detenido por el millonario robo a una contadora de un reconocido restaurante de San Isidro, ingresó el 9 de noviembre del 2015 a la Unidad 46 del Penal de San Martín, donde permaneció asta el 5 de junio del 2017.

Luego, pasó a la Unidad 48 del mismo penal hasta diciembre del 2018 y finalmente lo trasladaron a la Unidad 30 de General Alvear hasta el 31 de julio del año pasado, cuando un juez de Ejecución Penal le otorgó una libertad asistida en el contexto de pandemia, excusa que dejó en la calle -se estima- a unos 4000 presos. Para entonces, Pardo ya estaba imputado en otra causa que lo investiga por planear el asesinato del fiscal Patricio Ferrari, quien lo había llevado a la cárcel en la primera investigación. Su abogado sostiene que una vez afuera comenzó a manejar un astillero.

Carlos Cammatora, que murió ahogado en el naufragio (se supone que la lancha se hundió por la tormenta), fue preso en 2015 por un robo agravado por el uso de armas y abuso de armas, y fue condenado a siete años de prisión.

Su legajo indicaba que estuvo en la Unidad 28 de Magdalena cuatro años, luego paso a la Unidad 30 de General Alvear entre marzo del 2019 y diciembre del 2020 (donde conoció a Pardo) y finalmente en la Unidad 40 de Lomas de Zamora, de donde se escapó el 17 de marzo de este año y desde entonces permanecía prófugo.

Minin es dueño de un supermercado en la zona oeste del Conurbano y estuvo detenido en la Unidad 48 de San Martín tras ser condenado a 4 años en un juicio abreviado, por amenazar a un colectivero.

 

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