Crece el gasto social en planes de asistencia

Con un gasto equivalente a 800 millones de pesos por día, en los primeros cinco meses del año el Gobierno ya desembolsó la mitad de lo presupuestado para destinar a planes sociales, según trascendió ayer. El ritmo vertiginoso de las ayudas que emanan del Ministerio de Desarrollo Social no solo superan la proyección inicial, sino que además están por encima de los primeros registros de 2020: entonces, eran 600 los millones de pesos que se giraban cada día para este tipo de medidas.

Se trata de los fondos destinados de manera directa a programas sociales como el Potenciar Trabajo y la entrega de la Tarjeta Alimentar, medidas con las que se busca contener el impacto de la pandemia de coronavirus sobre los sectores más vulnerables de la sociedad.

Según datos oficiales, en lo que va del año a la cartera que conduce Daniel Arroyo -la más porcentaje de fondos ha recibido- se le han transferido desde el Ministerio de Economía 115.689 millones de pesos, de los $ 252,626 millones previstos inicialmente para todo el ejercicio. Esto es el 45,8 por ciento de toda la partida, que fue ampliada dos veces hasta 260.181 millones de pesos.

Hoy bajo la órbita del ministerio de Desarrollo Social dos programas que se quedan con el 88,6 por ciento de los fondos: Políticas Alimentarias, que involucra a la entrega de Tarjeta Alimentar, y el Potenciar Trabajo.

Políticas Alimentarias maneja una caja anual de $ 118.621 millones, administrada por Laura Valeria Alonso, de La Cámpora.

Por su parte, el Potenciar Trabajo, cuenta con 111.997 millones de pesos al año y depende de la Secretaría de Economía Social que encabeza Emilio Pérsico, referente social del Movimiento Evita que a principios de mes criticó la decisión del presidente, Alberto Fernández, de ampliar el alcance de la Tarjeta Alimentar (ver aparte): “Es pan para hoy y hambre para mañana”, cuestionó. También, otro dirigente oficialista como Juan Grabois salió a disparar contra la Tarjeta Alimentar, a la que tachó como “una política estúpida”. Y pidió por medidas que promuevan mayor inclusión laboral.

Mientras, se prevé que el gasto social se siga disparando al ritmo de la ampliación -en presupuesto y asistencia- de los programas anunciada días atrás por el Gobierno.