El uruguayo Ostojich no tuvo fisuras en un juego picante y complejo
Edición Impresa | 11 de Julio de 2021 | 05:21

El uruguayo Esteban Ostojich fue el árbitro de la final de la Copa América 2021, que disputaron ayer en el Maracaná las potencias sudamericanas, Argentina y Brasil y que terminó con victoria y campeonato para la albiceleste.
Ostojich, que estuvo acompañado de sus compatriotas Carlos Barreiro y Martín Soppi como jueces de línea tuvo un rendimiento intachable para un compromiso complejo de conducir.
El charrúa no se dejó intimidar ni apalabrar por grandes estrellas de ambos equipos y sin exagerar con tarjetas ni ademanes sacó adelante un juego histórico.
Tampoco se dejó impresionar con algunas caídas de los jugadores brasileños dentro del área. Como fue el encontronazo de Paquetá con Guido Rodríguez.
Lo propio hicieron sus asistentes, pero sobre todo Soppi, quien estuvo bien atento tanto en el gol de Ángel Di María como en el tanto anulado a Richarlison por posición adelantada. Ambas jugadas fueron muy finas, pero el línea no dudó en ninguna.
Amonestó bien a Leandro Paredes, Gio Lo Celso, Rodrigo De Paul y Nicolás Otamendi. Siempre estuvo cerca de las acciones y llevó el juego corto.
Además, con criterio, aplomo y personalidad abortó cualquier tipo de trifulca amagó a generarse después de una pierna fuerte que había metido el mencionado Otamendi.
Ostojich, de 39 años, es árbitro internacional de la FIFA desde 2016 y había dirigido el partido inaugural de la Copa , entre Brasil y Venezuela el 13 de junio en el estadio Mané Garrincha de Brasilia. El encuentro había terminado con victoria brasileña por 3-0.
Por otra parte, a diferencia de muchos colegas a lo largo del certamen, no debió apelar a la tecnología para repasar jugadas polémicas. Pregonó un juego fluido más allá de la pierna fuerte y lo trabado que se había hecho, sobre todo, en el primer tiempo.
CONTRA LOS PRONÓSTICOS
El uruguayo es el árbitro con más partidos dirigidos en la actual edición de la Copa Libertadores: lleva siete, incluido el juego entre Junior de Barranquilla y River Plate, el pasado 12 de mayo, que tuvo que ser suspendido por el lanzamiento de gases lacrimógenos en los alrededores del estadio Romelio Martínez.
Más allá de esta experiencia y chapa, la designacion de Esteban Ostojich no había caído del todo bien en el búnker albiceleste en la previa.
El uruguayo nacido en San José era visto como un juez de tarjeta fácil y por lo tanto, la preferencia era para el árbitro español Jesús Gil Manzano.
Sin embargo, el arbitraje fue contra todos los pronósticos y prácticamente no tuvo fisuras. Incluso, en algunas divididas no le pesó la localía y falló en favor de la Selección argentina. Antes del final del juego y también con mucho criterio, adicionó 5 minutos debido a la cantidad de cambios y los parates que tuvo el encuentro.
Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE