Advertencias médicas sobre incumplimientos en los planes de vacunación infantil

Una vez más se conocen serias advertencias por el atraso en la vacunación de los niños, derivada de la incidencia por momentos excluyentes que tuvo la pandemia en las políticas sanitarias y que, en la práctica, se reflejó en un descenso ostensible en el cumplimiento del calendario de vacunación de los menores de edad para distintos males -sarampión, tos convulsa, meningitis, difteria, tétanos y otros- por lo que se ve incrementado el riesgo de que aparezcan brotes de estas enfermedades.

Ahora, tal como se informó ayer en este diario, fue la Organización Mundial de la Salud la que alertó sobre el riesgo de una “catástrofe absoluta” si no se soluciona el peligroso atraso en la vacunación de niños a raíz de la pandemia de coronavirus y las restricciones sanitarias que se levantan con demasiada rapidez.

“En 2021, tenemos el potencial para que se produzca una catástrofe absoluta”, señaló la directora del departamento de Vacunación de la OMS en Ginebra. La situación de niños no protegidos y un levantamiento demasiado rápido de las restricciones sanitarias contra la Covid -que cuidaban en parte contra algunas enfermedades infantiles- ya hacen sentir sus efectos, por ejemplo con brotes de sarampión en Pakistán, subrayó la responsable de la OMS.

Estos dos factores combinados son “la catástrofe absoluta contra la cual hacemos sonar la alarma ahora porque necesitamos actuar de inmediato para proteger a esos niños”, insistió. En 2020, 23 millones de niños no recibieron las dosis de vacunas contra la difteria, tétanos y tos convulsa, que sirven de medida de referencia, según datos publicados ayer por la OMS y Unicef.

Tanto desde el organismo mundial como de fuentes oficiales de salud y de entidades médicas de nuestro país se vino advirtiendo que es importante que la distribución de vacunas anticovid no se haga en detrimento de los programas de vacunación infantiles. También se alertó por el hecho de que muchos padres, por temor a posibles contagios de coronavirus, dejaron de acudir a los centros vacunatorios.

Cabe recordar que el año pasado autoridades sanitarias nacionales y provinciales confirmaron la existencia de caídas en la vacunación infantil y dijeron temer que la merma en la cobertura pudiera favorecer, especialmente, la reaparición de casos de tos convulsa y sarampión.

En esa misma línea, fuentes médicas del Hospital Noel Sbarra de nuestra ciudad, así como de la Sociedad Argentina de Pediatría, habían corroborado que, desde la aparición de la pandemia, había bajado a la mitad la aplicación de vacunas en los chicos, ello a pesar de que en la mayoría de las instituciones abocadas a ese tema se trabajaba con normalidad y con todos los protocolos preventivos requeridos.

Más allá de aspectos que pueden generar diversas interpretaciones, lo cierto es que se está frente a una realidad estadística sumamente preocupante en cuanto a la evolución negativa de los planes de vacunación en los últimos tiempos. Si bien se asegura que no faltan dosis en nuestro país, es preciso, entonces, que las autoridades sanitarias, en forma perentoria, intensifiquen campañas de esclarecimiento en la población, que la induzcan a cumplir con los programas de inmunización que son imprescindibles, en especial para la infancia.