A varios frentes: Campi, entre la televisión, el cine y el teatro, su gran amor

Comediante, actor y guionista, a quien muchos conocemos por su paso por “VideoMatch” y “ShowMatch” de Marcelo Tinelli, Campi disfruta de una carrera consolidada que fue mucho más allá de la tevé, y que incluyó participaciones en cine y también en teatro.

De hecho, por estos días, Martín Campilongo disfruta de ser parte de los tres formatos de la mano de exitosos proyectos.

De lunes a viernes, en Telefé le pone humor a “Flor de equipo” que conduce Florencia Peña; conductora y actriz con quien, además, compartió elenco en “La panelista”, que el jueves pasado llegó a los cines.

“Es un thriller de suspenso con humor negro y muy ácido donde a mí me toca un personaje totalmente distinto a lo que acostumbro y no hago humor, para nada”, dijo Campi, en diálogo con Télam sobre este filme de Maximiliano Gutiérrez que le apunta a la tevé basura, y que se puede ver en las salas locales.

“La panelista” sigue los pasos de Marcela Robledo (Florencia Peña), que se desempeña en un reconocido programa de chimentos, y que descubre una noticia que puede cambiar su vida y la historia de la televisión, desenmascarando la doble vida del querido y respetado galán Osvaldo Lebló (Diego Muñoz). Robledo está a punto de perder su lugar en el panel del programa de espectáculos y ésta es su oportunidad de evitarlo. Pero su compañero Ricardo Toledo (Diego Reinhold) quiere dejarla fuera de la primicia. Campi es otro panelista, compañero de Marcela, y quien sufre de celos por la popularidad que, de repente, ella toma debido a su información exclusiva.

En la pantalla grande, Campi ha tenido varias participaciones en importantes y desafiantes proyectos, como haberle puesto la voz a uno de los animales de “La vida secreta de tus mascotas” en su versión doblada, sin embargo se toma todo con calma y no desea por demás. De hecho, aseguró que “siento que siempre estuve donde debía estar”. En este formato, según anticipó, próximamente llegará “Ex Casados”, de Sabrina Farji, que está protagonizada por Roberto Moldavsky y Jorgelina Aruzzi, y en donde él tiene una participación especial.

Lo que sin dudas más lo entusiasma, dijo, es el teatro, en donde está a punto de reponer “Los bonobos” en la sala porteña Lola Membrives.

Nacido hace 52 años, este actor, que debutó en la tevé de la mano de Nico Repetto en los 90, no dudó en definirse como “un enamorado del teatro”, en tanto, para él, estar en las tablas es “como volver a la base, como volver a estar en mi lugar favorito y de pertenencia”.

“Volver al teatro es como volver a la base, como volver a estar en mi lugar favorito y de pertenencia”

Formado teatralmente por Agustín Alezzo y en clown por Gabriel Chame Buendia en el ámbito del Teatro Nacional Cervantes, Campi supo trajinar el under de manera solitaria amenizando shows de colegas actores y de músicos, hasta que le tocó ser el protagonista.

UN CIEGO, UN SORDO Y UN MUDO

En “Los bonobos”, la comedia creada por el francés Laurent Baffie (”Toc Toc”), que encabeza junto a Osqui Guzmán y Peto Menahem y que el jueves a las 20 retoma las funciones interrumpidas por la pandemia en la sala ubicada en Av. Corrientes 1280, tres amigos (uno ciego, otro mudo y el tercero sordo) están habituados a pagar por sexo, pero deciden buscar parejas formales, por lo que inventan una suerte de juego en el que convocan a tres mujeres desconocidas para entrevistarlas en forma alternada y así observar las posibilidades de vínculo.

En la trama adaptada por Julián Quintanilla y dirigida por Alberto Negrin y Gabriel Chame Buendia, participan Lizy Tagliani como una mujer policía, Anita Gutiérrez como la empleada de una zapatería y Manuela Pal como una muchacha moderna.

Según manifestó el comediante, “volver a esta obra me significa reencontrarme a jugar con amigos y también con la respuesta de la gente porque se divierte sin parar durante una hora y veinte minutos. A mí me gusta poder hacer eso y recibir esa respuesta inmediata”.

Para Campi, al igual que “Toc Toc”, en “Los bonobos” se destaca la “pluma” de Laurent Baffie al delinear “una mirada bastante crítica, ácida y graciosa del ser humano y de la sociedad” y por hacerlo, sobre todo, como una “comedia brillante”.

Sobre los desafíos que le impuso este proyecto, Campi aseguró que “nunca tuve que hacer un personaje semejante y para ello debí aprender lenguaje de señas”, lo que supuso todo un reto profesional para él.