La historia platense, desde sus raíces

Edición Impresa

Uno de los paisajes encantadores de La Plata lo ofrecen, más o menos por esta época, los jacarandás de diagonal 73, aunque este año prácticamente no florecieron (hay quienes lo adjudican a la sequía y quienes se lo endilgan a las malas prácticas de la poda). Pero no siempre estuvieron ahí: “Fueron plantados en 1918”, dice el investigador Nicolás Colombo, igual que los que se encuentran en las plazoletas de 8 y 61 y 8 y 43. “Este último ejemplar es el único árbol de la ciudad declarado “histórico” a nivel provincial desde 1990, ya que se dice que fue cuidado por el escritor Benito Lynch, quien vivía enfrente”. Los famosos naranjos amargos de calle 47 datan de 1933 y pocos años después el emperador del Japón donó varios Ginkgo Biloba, que fueron colocados en una calle de ingreso al Museo de La Plata. “En 1936 el ingeniero agrónomo Alberto V. Oitavén decretó al ombú como árbol patrono de La Plata, dado que es la capital de la provincia, y dicho árbol es típico de la región pampeana. Lamentablemente en los últimos años desaparecieron el de Plaza Italia (2011); Plaza Malvinas (2018); 60 entre 11 y 12 (2020) y 14 y 38 (2021)”, refiere Colombo. Otro dato curioso del arbolado urbano es la plantación de moreras alentada por la industria de la seda, ya que en El Mondongo se había instalado una gran hilandería. “Hoy en día los fresnos son los árboles más abundantes, dado que crecen rápido, dan buena sombra y toleran bien las podas drásticas que suelen hacer las autoridades. Sin embargo, las últimas plantaciones cada vez van incorporando más los árboles de menor porte, que no ocasionan problemas de raíces pero tampoco dan mucha sombra por su escaso porte, como los crespones y los Rhus”, detalló el investigador.

Un personaje fundamental en la historia platense es Carlos Spegazzini (1858-1926), fundador, en 1891, del arboretum de la Facultad de Agronomía, en 60, diagonal 113 y 118. “Spegazzini traía plantas de sus expediciones por todo el país. Muchas de ellas estaban en su casa, que hoy pertenece al instituto de la UNLP que lleva su nombre, otras están en el jardín botánico, y muchas diseminadas por el Paseo del Bosque, principalmente entre el Museo y el Zoológico”, concluyó Colombo.

 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE