Más denuncias por intrusión en un edificio abandonado del Centro

Los problemas asociados a la intrusión en un edificio en construcción en estado de abandono, en 45 entre 11 y 12, volvieron a exponerse ayer, según las denuncias del vecinario, en toda la dimensión que tiene la preocupación en la zona.

En horas de la tarde, se presentó en la cuadra una comitiva policial y se vio un intercambio con varias personas jóvenes, todos varones, en la vereda, según le contaron a este diario desde la zona. Todo derivó de quejas por lo que ocurría, un rato antes en la estructura de hormigón de varios pisos de alto.

“La Policía entró al edificio de al lado y sacó a tres ocupas que estaban adentro porque un rato antes gritaban y tiraban piedras desde uno de los pisos más altos”, dijo Laura, una vecina de la cuadra.

Según la mujer, el episodio puso en esta de alerta al vecindario y se pidió la presencia de la Policía a través de la línea 911.

Se calcula en la zona que la construcción parada hace décadas funciona como una especie de refugio. Eso ocurre desde hace varios años, pese a que en 2015, tras otras quejas y operativos de la Policía, se levantó una pared entre la vereda y esa propiedad.

Según se sostiene en la zona, esa medida tuvo efecto durante un tiempo, hasta que la estructura de mampostería apareció con un boquete por el que puede pasar una persona.

Así, el lugar recibe visitas en forma cotidiana. En las casas y edificios lindantes advierten esas presencias. “Hay gritos y desmanes y generan peligro porque también tiran cosas hacia afuera”, apuntó un vecino de la cuadra.

El mes pasado, en un antecedente cercano del episodio de la víspera, también se reclamaba por la asistencia policial ante el descontrol y las agresiones. “La situación es tan mala que algunos inquilinos de un edificio que está al lado decidieron dejar el departamento que alquilaban”, dijo otra vecina.