Alejo Alonso, otra vez ante un tribunal por la muerte de un hombre en City Bell

El 21 de diciembre de 1999 se produjo una discusión por un incidente vial. Hubo un golpe y una caída fatal. Es el segundo debate por este caso

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La causa que investiga la muerte de Gaspar Argentino Ayala (40) en City Bell, tras una discusión de tránsito, aún no está cerrada. Aunque cueste creerlo, a más de 22 años del caso, hoy volverá a reunirse un tribunal oral para ventilar en audiencia pública las circunstancias que provocaron el hecho.

Alejo Alonso, protagonista de varios episodios que terminaron en la Justicia, estará sentado en el banquillo de los acusados junto a sus abogados defensores Alfredo Gascón y Miguel Molina.

Como representante del Ministerio Público intervendrá María Victoria Huergo, en reemplazo de su colega Silvina Langone, que se encuentra actualmente de licencia.

Los jueces, del TOC III, serán Hernán Decastelli, Ramiro Fernández Lorenzo y Cecilia Sanucci.

Cabe destacar que este es el segundo debate por el incidente mortal.

En 2011, el Tribunal Oral Criminal I de La Plata absolvió a Alonso en un fallo dividido, que dejó tela para cortar.

Dos años después, el Tribunal de Casación bonaerense anuló esa resolución. Fue en otra votación dividida, con la firma de los magistrados Federico Domínguez y Ricardo Borinsky, que se resolvió hacer lugar al recurso presentado por la fiscalía, que en el juicio inicial había pedido 15 años de prisión para el acusado.

Por mayoría, entonces, se dispuso anular el veredicto, con devolución de jurisdicción al tribunal para que, con otra integración, se realice el dictado de un nuevo pronunciamiento.

Demás está decir que todavía hay ciertas dudas de que se lleve adelante el proceso, porque la defensa tendría entre sus manos insistir con un planteo de prescripción que está en trámite ante la Corte de Nación, es decir, la extinción de la hipotética pena por el transcurso del tiempo.

“Podría ocurrir que el tribunal condene a Alonso y salga esposado de la audiencia y la Corte, en paralelo, declare la prescripción. Un absurdo”, señalaron desde la defensa técnica.

La muerte de Gaspar Argentino Ayala ocurrió el 25 de diciembre de 1999 cuando fue golpeado en forma “demoledora y devastadora”, tras un conflicto vial suscitado en las calles 13 y 21A.

Por la muerte de Gaspar Ayala, aún hay pendiente de resolución un planteo en la Corte de Nación

 

Quien golpeó al hombre fue Alonso, que para la Justicia de aquél entonces resultó autor responsable del delito de “homicidio simple por dolo eventual”. Por eso le pidieron 15 años de cárcel.

Los forenses concluyeron que el autor “tendría que ser un karateca o alguien especializado en el arte de golpear”.

Si bien Ayala llegó a su domicilio luego de esa gresca, murió cuando estaba recostado sobre una cama.

En un preciso y extenso alegato, la fiscal Langone, acusó a Alonso, citando uno a uno los testigos que lo ubicaron en la escena de los hechos, con las apreciaciones de cada uno de ellos, algunos también víctimas de los golpes. En ese orden recordó a un testigo que dijo que recibió el ataque del acusado y en la audiencia graficó: “Fue como si me pegara Tyson”.

La fiscal señaló que otros testigos recordaron los fríos movimientos del acusado, de un “cuerpo monstruoso, como de alguien entrenado”, golpeando a Ayala, quien “quedó petrificado, no respondía, luego de caer al suelo”.

UN ANTECEDENTE CRIMINAL

Alejo Alonso purgó condena de 14 años de prisión por el recordado crimen del repartidor de pizzas, Adrián Santana, que fue ejecutado de varios disparos en la esquina de las calles 12 y 38, en la noche del 23 de octubre del año 2000.

En un primer momento se especuló con que pudo atropellarlo un auto que escapó, pero los vecinos contaban a quien quisiera oírlos que ellos habían escuchado varias explosiones, como disparos.

Los forenses les dieron la razón: Santana recibió seis balazos, cinco de los cuales ingresaron en la axila, en la espalda y en uno de los glúteos, y otro en el tórax. Este último fue el letal.

La Justicia concluyó que el crimen fue motivado por un ajuste de cuentas, a raíz de un incidente que tuvieron Alonso y Santana en el exbar Almendra, de 8 y 57.

En rigor de verdad, Alonso estuvo poco más de ocho años tras las rejas, ya que fue beneficiado por la aplicación de la derogada ley del “2 x 1”.

Alonso pasó detenido casi siete años, entre 2003 y 2010, por lo que llevaba computados unos 12 por aplicación de esa polémica normativa.

 

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