Tensión, traslados y cierre del Hogar Servente

Entre el personal del “Hogar Servente”, de Villa Elisa, se relata una escena cargada de angustia, ocurrida en el final de la tarde del martes. Varias voces que escuchó este diario dan cuenta de la sorpresa, fea, para alrededor de una docena menores de entre 3 y 13 años al entrar en vehículos que los llevaron a otros centros de atención de chicas y chicos en situación de vulnerabilidad en la Ciudad. También lo fue para el personal de la institución, que se enteró en ese momento de que el organismo quedaría cerrado por obras a raíz de problemas que afectan la seguridad edilicia.

El cuadro tiene -en esas versiones- un marco de tensión que se habría acentuado hace algunas semanas, cuando habrían presentado su renuncia directivos de la institución. Los cruces entre adultos habrían derramado pesar hasta en los chicos, quienes habrían protagonizado una especie de escape, con destino a la casa de un integrante del equipo saliente para pedir por la vuelta.

Nada de eso fue parte del registro oficial de la situación en el antiguo “Instituto” que funcionó antes en la zona del Distribuidor Pedro Benoit.

Según se informó desde el Ministerio de Desarrollo de la Comunidad, el Organismo Provincial de la Niñez y Adolescencia informó que el martes los niños, niñas y adolescentes alojados en el Hogar Convivencial María Luisa Servente (Centenario y 47), “fueron trasladados a otros hogares y dispositivos del Organismo, de manera transitoria”.

Según una fuente consultada en esa cartera, “la decisión de traslado se produjo en el marco del `Programa de Rehabilitación y Puesta en Valor de Hogares y Casas de Abrigo´ provinciales y de las obras que se estaban llevando adelante en el Hogar Servente”. Puntualmente, “ante una comunicación oficial de la Dirección de Infraestructura Provincial, en el que se informaban desperfectos eléctricos en el edificio, frente a un peligro inminente y por razones de seguridad y resguardo de la integridad de las y los niños y niñas allí alojados, se procedió a su traslado hasta tanto se resuelva la situación y se terminen las obras de mayor envergadura”.

Por su parte, otra fuente de la comunidad del Hogar, mostró estupor la forma en que se concretó la mudanza: “Los chicos volvieron de la escuela y casi de noche fueron trasladados, prácticamente con lo puesto. Los subieron a autos y se los llevaron entre llantos”, dijo. Y añadió que unos días antes “un grupito se escapó y fue a la comisaría a pedir que vuelvan los anteriores directivos. Fue como un pedido de protección”.

Otra persona de equipo del Hogar apuntó que la salida fue en dirección de la casa particular de otra integrante de ese equipo.

Las niñas y niños tienen nuevo lugar y parte del personal volvería a otros organismos de los que habían llegado. Esperan nuevo destino quienes están designados en el Servente.