La defensa de Melazo, con duros cuestionamientos

El avance del juicio por la denominada megabanda, que tiene detenido al ex juez César Melazo, como presunta cabeza de un grupo dedicado a cometer delitos, con el aparente apoyo de policías, barras y delincuentes con prontuario penal, motiva todo tipo de reacciones en La Plata y, como es lógico, de parte de la defensa de quien fuera titular del Juzgado de Garantías N° 2 de nuestra ciudad.

Se trata de los abogados Juan Pesquera y Christian Romano, quienes salieron a marcar su postura con cuestionamientos a la instrucción de la causa, que llegó a la instancia de debate.

En ese sentido, indicaron que “cursando la cuarta semana de juicio oral, el derrumbe de la historia urdida por la acusación es cada vez más evidente”.

“El único proceder irregular que ha quedado demostrado, a la luz de los más de 120 testimonios escuchados, es el de la instrucción”, agregaron puntualizando en los numerosos testimonios que, según entienden, “han sido forzados”.

“Corona ese rosario de procederes exóticos el de un testigo de un allanamiento en la casa de nuestro defendido, al que se le exhibieron las actas y se le exigió que las firmara, sin haber comprobado que no sabía leer ni escribir”, comentaron.

Por último, mencionaron que “la mentada megacausa enfila un destino aciago, especialmente si se entiende que se han mantenido presas muchas personas, muchos años por una febril imaginación de la parte acusadora”.

LAS 13 ARMAS

El día del allanamiento en la casa de Melazo, en Gorina, de la que salió esposado, la Policía Federal secuestró 13 armas, algunas de ellas largas y de gran poder de fuego.

Precisamente, en la jornada de ayer declararon varios peritos y policías que participaron del operativo.

Según voceros de tribunales, uno de los expertos comentó que al menos una de esas armas tenía la numeración de la Policía bonaerense.

También declaró el dueño de una vidriería, que había denunciado una agresión a tiros en medio de una disputa entre facciones de la hinchada de Estudiantes y que señaló a Juan Farías -el hombre asesinado en 2010 y cuya muerte le dio impulso a la investigación- como la persona que se presentó en su comercio a pedirle plata para enfriar la situación y pedirle que cambie sus dichos.

También le ofreció sus servicios para solucionarle un problema con la casa, ya que tenía una orden de desalojo.

Igual a Farías lo terminaron matando y el testigo no pudo evitar el lanzamiento.

Otra declaración que no pasó desapercibida fue la de “Papupa” Córdoba, ex jefe de la barra de Gimnasia, quien señaló a Melazo por haberlo involucrado en el triple crimen de la Planta Transmisora y contó que tuvo contactos con Farías por esa situación.