El Papa está mejor del problema respiratorio

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CIUDAD DEL VATICANO

El estado de salud del papa Francisco es bueno, no tiene fiebre y su situación respiratoria mejora, después de que un “problema de inflamación pulmonar” le impidiese este domingo rezar el Ángelus en la plaza de San Pedro. “El estado del Papa es bueno y estable, no tiene fiebre y su situación respiratoria mejora claramente”, indicó el portavoz vaticano, Matteo Bruni, al explicar que la tomografía axial computada (TAC) que se le realizó el pasado sábado “ha excluido una neumonía”.

Francisco recibió ayer en audiencia al presidente de Paraguay, Santiago Peña, en su residencia de la Casa de Santa Marta, algo completamente inusual, que sólo pasó en contadas ocasiones, según fuentes vaticanas.

“Confirmo que la TAC descartó una neumonía, pero mostró una inflamación pulmonar que causaba algunas dificultades respiratorias. Para un tratamiento más eficaz, se le colocó una cánula con aguja para infusión de antibióticos endovenosos”, indicó Bruni. El portavoz añadió que “para facilitar la recuperación del Papa, algunos compromisos importantes previstos para estos días han sido aplazados para que pueda dedicarles el tiempo y la energía que desea”. “Otros, de carácter institucional o más fáciles de soportar dado su actual estado de salud, se han mantenido”, como ha sucedido con la audiencia a Peña.

Por el momento se desconoce cuáles son los otros actos que serán mantenidos en los próximos días, mientras en su agenda figuran para hoy un encuentro con los obispos españoles y el viaje de Dubai desde el viernes 1 al domingo 3 de diciembre para la cumbre COP 28 sobre el cambio climático. “Hoy no me puedo asomar por la ventana porque tengo este problema de inflamación pulmonar”, dijo Francisco en la retransmisión en directo del Ángelus por la televisión vaticana el domingo.

El Santo Padre había cancelado sus compromisos del sábado por un “ligero estado gripal” según la Santa Sede.

En las imágenes difundidas por televisión el domingo, pudo observarse que en la mano derecha Francisco llevaba un parche y dos accesos para vías intravenosas, mientras recitaba el Ángelus sentado en el altar de la capilla.

 

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