El sueño de Felipe era jugar en Gimnasia

Por ANTONIO SÁNCHEZ ASTROLOG

El inicio de Feli es lindo. Un día estábamos en la cola de un supermercado y viene una persona grandota, Felipe toda la vida vestido de Gimnasia, en todos lados. Y el hombre le pone el cuerpo y le dice “¿vos de que cuadro sos? De Gimnasia. ¿Y vos? No, yo no, medio prepoteándolo. Yo no me animé a decirle nada porque era grandote para pelearnos, pero dije ‘sí, solo de Gimnasia’. Y ahí dijo ‘Yo también’ y lo abrazó. Ahí salió el tema de que éramos de Rafaela, que yo era Sánchez Astrolog y se acordaba de mi época de jugador. Era Chachi Alonso, allegado y luego dirigente, que le dijo que alguna vez lo iba a llevar a Gimnasia. ‘Yo juego en Atlético pero es mi sueño Gimnasia’ le dijo Feli.

Quedó ahí, seguimos en contacto porque los dos teníamos en común la pasión por Gimnasia y las vacas (soy veterinario y cuando dejé el fútbol me dediqué a trabajar en una empresa láctea de Rafaela y Chachi tenía un tambo en Cañuelas) y un día, cuando Feli era suplente en Rafaela, me dijo ‘papá, voy a dejar el fútbol, quiero ir a estudiar pero vos me prometiste llevarme a Gimnasia como a Manuel (el hermano)’. Yo no quería porque el DT era el Bocha Toledo y habíamos sido compañeros muchos años, entonces le dije que le pidiera a Chachi. Él averiguó, le dijeron que se tenía que presentar un lunes. Lo llevé toda la semana sin entrar a Estancia y el sábado en un amistoso con Defensa y Justicia anduvo bien jugando de 6 (era volante central) y el Bocha le dijo ‘decile a tu papá que venga a hablar, que vas a quedar’. Nos estrechamos en un abrazo con el Bocha y me puso feliz que las cosas hubieran sido así, porque fue todo mérito propio de Felipe y no comprometí al Bocha que tenía que tomar la decisión. Fue una emoción enorme.

Chachi siempre decía que Felipe iba a jugar de 6 y que algún día iba a jugar en primera. Se dio. Lo único triste es que no esté para verlo, porque lo había adoptado. Así comenzó esta historia.